Seduciendo a mi dulce hermanastra

Capitulo 4

Después de nuestra pequeña sesión en la que me comí a Summer, aunque en un momento pensé que iba a explotarme la cabeza con los músculos de sus piernas cuando la llevé al orgasmo mientras apretaba fuertemente sus piernas alrededor de mi cabeza mientras convulsionaba.

Íbamos a continuar, pero Summer sugirió que termináramos nuestra sesión más tarde para que Kelly no descubriera a su amiga follándose a su hermano.

Me irritó un poco que Summer se corriera y yo no, pero no podía discutir con su lógica.

Después de que Summer se volviera a vestir y nos pusiéramos bien, Summer me miró y dijo: —¿Cómo ayudamos a Kelly?.

Me encogí de hombros, limpiándome la boca de los jugos de Summer, haciéndola sonreír. —Supongo que lo más lógico es interrogar a Kelly para que te dé todos los detalles.

Summer pensó por un momento antes de sacar su teléfono. —Tengo una idea mejor. Puedo enviarles un mensaje de texto a Ashley y Ella para ver si están bien para hablar con sus novios".

La miré confundida, —¿Qué tienen que ver Ashley y Ella con ayudar a Kelly?

Ella me miró como si fuera tonta y dijo:

—Porque están saliendo con chicos de 7 y 11 años, claro.

Entonces caí en la cuenta. Debería haberlo pensado. Kelly podría contarnos su versión de la historia, pero en la mayoría de los casos, el tipo hizo algo para terminar la relación con Kelly, no al revés.

Saqué mi teléfono y dije: —Le enviaré un mensaje a Jason, él era el número 4.

Jason fue uno de mis amigos más cercanos mientras crecí hasta que lo encontré con Kelly.

Al principio me enojé porque mi amigo hacía cosas a mis espaldas para estar con Kelly, pero él juró y perjuró que el sentimiento era mutuo.

Luego, después de dos meses, rompieron. Después de eso, dejé de hablarle.

•Yo:¿Qué pasa?

•Jason: ¿Por qué carajo me envías mensajes de texto después de tanto tiempo?

•Yo: Sé que ha pasado mucho tiempo.

•Jason: Sí, desde que lo de Kelly y yo no me has hablado. Creo que lo último que dijiste fue: «Te voy a dar una paliza la próxima vez que te vea».

•Yo: Fue una mierda. Y no te escribo por eso.

•Jason: Entonces, ¿volvemos a hablar?

•Yo: No, sigo enfadado contigo. Tengo una pregunta rara, ¿no te importa responderla?

•Jason tardó un minuto pero respondió: Dispara.

•Yo: ¿Por qué exactamente se separaron todos?

•Jason: Vamos, hombre. ¿De verdad quieres que te lo cuente todo?

•Yo: eso estaría bien

•Jason: ¿Por qué?

•Yo: ¿En serio?

•Jason: Vamos, tío, éramos muy buenos amigos. Dame la dignidad y demuéstrame la confianza de nuevo.

•Yo: Suspiro. Bien. Estoy harto de que lastimen a Kelly y quiero saber por qué sus relaciones no duran.

•Jason: ¿En serio?

•Yo: Sí. Quiero saber.

•Jason: ¿Estás seguro que estás listo para escuchar esto?

•Yo: Honestamente no, pero necesito saberlo.

•Jason: Bueno. La verdad es que Kelly es... ¿cómo decirlo?... amigo, no te enfades... es una mojigata. Al menos conmigo era una mojigata.

•Yo: ¿Mojigata? No sé si debería enojarme que llames mojigata a Kelly. Más detalles.

•Jason: Recuerda que solo te lo cuento desde mi punto de vista. Solo puedo contarte lo que me hizo.

•Yo: Ok... cuéntalo, amigo.

Justo cuando estaba mirando mi teléfono demasiado de cerca, escuché a Kelly hablar: —¿Por qué ustedes dos están prestando tanta atención a sus teléfonos?

Casi salté del techo al oír hablar a Kelly. Intenté disimularlo y miré por encima del hombro: —Solo estoy haciendo mis tareas diarias con los juegos del teléfono. No sé nada de Summer.

Con el rabillo del ojo vi a Summer subirse rápidamente la cremallera y mirarme:

—Solo estoy subiendo nuestras fotos del gimnasio a las r************* . ¿Qué tal el baño?

Mi teléfono vibró en mi mano diciéndome que había recibido un mensaje de texto, pero traté de ignorarlo para que no fuera obvio para Kelly.

Observé a Kelly moverse rígidamente hacia nosotros y dejarse caer en el enorme asiento del sofá.

Ella suspiró: —Definitivamente trabajé demasiado mis piernas.

Summer rió levemente, pero no dijo nada. En vez de eso, envió un mensaje de texto y el mío vibró.

•Summer: Casi obtuve toda la información de los niños de 7 y 11 años. ¿Recibiste algo de tu amigo?

•Yo: Casi. Aún tengo que revisar sus mensajes.

Pasé de su conversación a la conversación de Jason.

•Jason: Era prácticamente un pez muerto. No hacía nada más que la postura del misionero y no se aventuraba a salir de ella.

•Jason: Uno pensaría que una chica que hablaba mucho sería horrible en todo.

•Jason: Si no fuera por eso y algunas otras cosas todavía estaríamos juntos.

•Jason: Entonces ¿estamos bien?

•Jason: Hola???

Finalmente envié un mensaje de texto.

•Yo: ¿A qué te refieres con que eres horrible en todo?

•Jason: Le faltan habilidades orales. Usa los dientes y se rasca. Lo cual es sorprendente para una chica que presume de poder tragarse un plátano entero sin atragantarse. Además, cuando tenía mi semen en la boca, corría al baño y lo escupía, o incluso vomitaba. Después de vomitar un par de veces, mis ganas de seguir con la diversión se acabaron.

•Jason: No hacía otra postura que no fuera la del misionero, lo cual es sorprendente con la cantidad de juguetes que tiene. Y sí, hacía el ángulo incorrecto o no aguantaba la posición mucho tiempo. Un par de veces casi me rompe el pene porque se ponía mal en la postura o se movía.

•Jason: No me dirigía ni me fijaba en mis habilidades orales. Evitaba que la probara y, en lugar de eso, intentaba cuidarme. O hacíamos directamente la postura del misionero. Y como era tan cercana, siempre me apartaba o me decía que me diera prisa.

•Jason: Era frustrante, tío. Quería probar tantas cosas, pero ella no me dejaba o no me dejaba hacerlo por mucho tiempo. Llegué al punto de que ya no quería intentarlo más. Ya sabes a qué me refiero.

Finalmente envié un mensaje de texto.

•Yo: Entonces, si tuvieras que calificar todas sus habilidades.

•Jason: Vaya, no quiero ser demasiado duro, pero siendo sincero, un sólido 3 sobre 10. Recuerda que soy solo yo. Puede que haya mejorado desde que me conocí.

•Yo: Gracias hombre.

•Jason: Entonces ¿estamos bien?

•Yo: Quizás algún día, pero esto ayuda. Te lo agradezco.

Cambié mi conversación de Jason a Summer.

•Yo: Recibí la información de Jason, el chico número 4. Supongo que después de todo Kelly es una mojigata.

•Summer: Eso es básicamente lo que me dicen los chicos 7 y 11. Supongo que habla mucho, pero cuando se trata de los hechos, es una gran decepción.

•Yo: Entiendo por qué eso frustraría a muchos. Tú no eres así, ¿verdad?

•Summer: ¡¡¡Ni hablar!!! Disfruto de todo, desde dar hasta recibir. Y si la dieta del chico es la adecuada, su sabor puede ser embriagador.

Le sonreí mientras me veía leer su mensaje y me guiñó un ojo. Entonces oímos los ronquidos de Kelly, que estaba completamente desmayada.

Volví a hablar en lugar de enviar mensajes de texto: —Ahora sabemos cuál es el mayor defecto de Kelly.

Summer me miró a mí y luego a su amiga:

—Sé que es una pena. Siempre pensé que era la reina en cuanto a cómo hablaba del disfrute, pero escuchar que es un fracaso es un poco decepcionante.