Prólogo
Una carta para : Alex.
Abril, 2010
Si alguien me hubiese dicho que las noches frías se volvería mi cálido refugio, y que la rareza que volvería mi amiga , no me lo hubiese creído hasta ahora. Siento que con cada paso que doy es más cercano la hora de dejarme caer al hermoso acantilado, que mis respiración se vuelve frenética y que mi pensamientos de descontrolan haciendo que mis sentidos quieram encontrar el colapso.
Cuando te conocí fue como si alguien me habría metido en un libro de lo que siempre suelo perderme, encontrarme con una falsa realidad y empezando a reinar en mi la hermosa imaginación, pero cuando despierto en vez de llorar por una idas siento que sonrió por recordarte entre las sobras de la noche y ver tu silueta entre la luz de las velas y saber que todo lo que viví contigo fue verdadero.
Sueño con verte con el mismo cuerpo que yo, saber como eres siendo alguien de misma r**a que yo, soñando una vida juntos aunque la sociedad y todo el mundo nos pida a gritos lo contrario. Quiero que te vuelvas todas mis noches dueño y que tu corazón siempre sea tuyo.
Quiero que seas mi única ilusión.
Me pierdo en eso ojos que me están marcando un antes y un después, algo que me llama pero las alarmas de peligro me recuerdan que no debo hacerlo. El corazón quiere ser el capitán mientras quiere mandar a mi mente ser el navegante a seguir ordenes.
Siempre el orden había sido parte primordial de mi vida, de todo mi sistema como ser humano. Que sin el no podía vivir hasta perderme ese hilo llamado adrenalina que ahora más que nunca tengo más sed de viviría constantemente. Me dirán terca pero quiero ser yo la que que arrisgue un todo un nada porque ahora más que nunca quiero sentirme viva, quiero vivir a su lado aunque eso sea fuera de las leyes, sea un amor prohibido, nuestro amor prohibido.
En mis profundos deseos y en mis desgarradores anhelos quiero gritarle al mundo que te amo pero no puedo, quiero desearte todo el tiempo y que aveces me quitas hasta el aliento, cobarde me vuelvo a tu lado, inocente había sido toda mi vida para contigo lo pierdo. La locura me vuelve presa de su alucinante misterio y la cordura poco a poco la voy perdiendo.
La madre luna será la única como nuestro testigo, en la noche que quiera bailar bajo a ella con me vestido rojo como ma sangre carmesí que corre de mis heridas pasadas, ahora haciéndome más fuerte para querer lucirlas sin miedo y que él me vea con esa mirada llena de deseo y quiera bailar conmigo bajo la misma luna.
Diría que esta historia podría ser de cuentos pero ambos sabemos que tenemos nuestros oscuros demonios queriendo ser los verdaderos protagonistas de nuestra historia de oro, crear nuevo recuerdos a tu lado pero... ¿quien dijo que las historias de amor tenia que ser de colores rosados?