Tatuaje de luna y sol

                                                                                                                                         TATUAJE DE LUNA Y SOL                                                                                         GRECIA                                                                                             *** “Cuenta la leyenda, que siglos atrás, reinaba la oscuridad en la tierra. Siempre era de noche; los seres de luz más poderosos Vivían en el cielo, un día se reunieron para crear el sol y así iluminar la tierra. Y así fueron creados los astros más importantes de nuestro cielo. El sol y la luna. Para el gran día se presentaron dos candidatos para ser el sol: el primero era fuerte y rico, vestía ropa costosa adornada con piedras preciosas. Ofreció oro como muestra de su orgullo El segundo por su parte, era pobre y feo, estaba cubierto de llagas, y vestía ropa vieja, como era muy pobre solo ofreció la sangre de su corazón, además de sus humildes y buenos sentimientos. Había una hoguera muy grande, el más valiente debía saltar y convertirse en el sol, el rico tuvo miedo y huyó, pero el segundo, quien era realmente valiente, dio un salto a la hoguera y se convirtió en el sol. El primero se sintió avergonzado y humillado por su cobardía y sin pensarlo saltó a la inmensa hoguera, apareciendo en el cielo un segundo sol. Los demás seres de luz estuvieron de acuerdo que en el cielo no podían existir dos soles, así que decidieron apagar el segundo sol, tomando un conejo por las patas y con mucha fuerza lo lanzaron. El brillo de este disminuyó y al pasar el tiempo se convirtió en la luna” —Que te pareció Viviana —cerrando el libro —. Se supone que en esta leyenda yo represento al primer hombre y a la luna, a diferencia que no solo soy egoísta como el que se describe acá, sino que además llevo la marca del mal, estoy destinada a acabar con el mundo —comente sonriente. —No lo creo Grecia, te conozco bien, eres mi mejor amiga y sé que aunque te divierta parecer una mala persona, dentro de ti hay un ser puro y bondadoso. Las profecías son una tontería, mírame soy humana sin poderes y nada especial, y vivo en un mundo mágico, no me he derrumbado siendo la “rara” porque mi mejor amiga me defiende. —Debes ayudarme Viviana  —tomando su mano con fuerza  —. Cada día me siento más ahogada, por todas estas voces y sueños, debo salir de este mundo, necesito encontrar a mi papa. —Grecia, es una locura —murmuro entre sollozos —. El tío Nick vendrá en un par de meses, como lo hace siempre. Sé que lo extrañas pero salir del mundo mágico sola te pondría en peligro, cuéntale a la tía roma de tus sueños, y esas voces que están en tu cabeza. Recuerda que ella también fue mitad humana mitad vampiro, te va entender mejor que nadie, ella sí que es una leyenda. —Por dios Viviana —abriendo la ventana de mi habitación para sentir la fría brisa de la noche estrellada —. Mi madre solo piensa en Rio, y en que debo irme a Rumania para prepararme como princesa, no deseo ser de la realeza, ni siquiera deseo estar en este mundo, siento que pertenezco a montevideo y es donde menos estamos.  —Solo te protegen de todos aquellos que por tener esa marca quieren hacerte daño —musito —. Además ¿dónde irías? Nadie sabe a dónde va el tío Nick cuando se transforma. —Seguiré su rastro. Necesito tu ayuda, no digas nada hasta que esté lo suficientemente lejos del mundo mágico. — ¿Cómo saldrás de aquí sin un portal? —pregunto angustiada, mientras me miraba desde la cama. Sonreí, seguramente con esa sonrisa macabra que me caracteriza, y con la que constantemente estoy siendo comparada con mi bis abuelo Víctor. Mirándola fijamente saque de mi escondite secreto el libro prohibido, ese que estaba escondido en el templo rojo como una reliquia, un libro puente que mi madre había traído de montevideo cuando fue por una de sus amigas.  Quedó en shock y conocía el porqué, estaba prohibido tocarlos, incluso estaban embrujados para que los alumnos no pudieran acercarse. —Este libro me llevara con papá, sé cómo usarlo, el abuelo en vacaciones me habló de su poder, en cómo lo usó para entrar al mundo mágico cuando mamá iba a ser asesinada. —Eso es muy peligroso Grecia, podrías quedar en un mundo paralelo, pueda que no sea una bruja, ni lobo, mucho menos un vampiro pero conozco cada historia narrada en este libro, conozco los poderes que se esconden tras las profecías, no dejare que hagas una tontería, eres mi única amiga te quiero como una hermana —abrazándome eufórica. —No seas tonta Viviana, recuerda quien soy, no creo que mi vida acabe perdida en un mundo paralelo, tampoco permitiré que acabe usando vestidos y siguiendo órdenes siendo una princesa en el mundo humano, el único que puede protegerme y cuidarme es mi papa. Con o sin tu ayuda lo haré. — ¿Hacer qué? —Pregunto mí apuesto hermano desde el marco de mi puerta —. Es hora de cenar, la orden de nuestra madre es que si no estamos los dos en la mesa no se sirva la comida, he pasado el día muy ocupado estudiando para los exámenes finales, en los que eres experta copiándote —murmuro mientras examinaba con sus ojos mi habitación. — ¿No tienes nada mejor que hacer Rio? Irte a escondidas a besar con tus cuatro novias, niño perfecto. Estoy ocupada en mis asuntos, que por cierto no te incumben, si tienes hambre sírvete tú solo la comida —tapando el libro rápidamente —. No entres a mi habitación sin tocar la puerta ¿ok? Papa te lo ha dicho muchas veces este es mi espacio. —Papa te consiente demasiado por eso eres tan malcriada y desconsiderada, pero no olvides que ---- — ¿Qué? —interrumpiéndolo —. ¿Que eres tú el elegido, que eres quien salvara a el mundo de mí, que eres el consentido de todos? —No seas estúpida, sabes muy bien que a mi esas tonterías me importan poco, eres mi hermana y te amo y te protegeré con mi vida si es necesario, a lo que me refiero es que te conozco —comentaba mientras caminaba de forma circular alrededor de mi —. Estás tramando algo. —Estas paranoico como mamá —sacándolo de la habitación a empujones —. Ya bajamos a cenar —cerrándole la puerta en la cara —. Límpiate la baba Viviana. ¿Qué crees que pasará si cuando lo ves te quedas callada? —No, no, no sé —tartamudeando, mientras tragaba grueso —. Cuando está cerca me quedo muda, quizás porque sé que jamás me verá como algo más que su prima —susurro resoplando —soy un cero a la izquierda,  él es el elegido. —Te golpeare —dándole un puñetazo en el brazo izquierdo —. Vales mucho más que esas idiotas brujas con las que se besa. Me iré esta noche. — ¿Cómo harás con los guardianes?, Demonio te cuida las 24 horas del día. —Me encargaré de eso. Bajamos a la gran mesa donde nos esperaba el abuelo Luccas, mi hermano Rio y nuestra madre, quien desde que éramos niños teníamos el honor de contar con su presencia en la mesa, aun cuando ella no degustaba la comida humana. Tenía la suerte de contar con el cariño y apoyo de mis abuelos, dentro de sus corazones existía el miedo de que algún día fuera tan cruel como el hombre que había marcado mi piel, conocía las razones por la que era tan protegida en mi familia, he sufrido todo tipo de restricciones por el miedo latente de mi familia, en que alguien pudiera lastimarme ¿Cómo podría ser lastimada la persona señalada por todos como el mal?. Comía en silencio mientras mi poderosa madre no dejaba de mirarme, seguro intentando entrar en mi cabeza, siempre deseaba saber qué pensaba. —La profesora de pociones me llamó hoy, me comentó que dañaste la poción de una de tus compañeras. ¿Por qué sigues empeñada en hacer tonterías que dañan tu imagen? —pregunto mama. Mirándome fijamente —¿Imagen? ¿Eso es lo que te importa? Si papá estuviera aquí preguntaría porque lo hice, no señalarme como sueles hacerlo tú. —Baja la voz Grecia, tengo el oído lo suficiente agudo como para escucharte incluso susurrar. No soy Nick que suele aplaudir toda tu malcriadez, no quieres estudiar, no quieres ir a Rumania, no quieres ser princesa ¿Qué quieres tú en la vida? —Quiero ser yo, mamá —gritando —. Quiero poder encontrar el camino que me corresponde a mí sin que tú estés metida en mi vida todo el tiempo tratando de que sea quien no soy, porque tienes miedo que sea como Víctor, no pedí esta maldita marca. Lamento no ser como Río —se levantó rápidamente usando su velocidad, tomando mi rostro. —Tú no eres como Víctor, no me importa que lleves esa marca en tu piel, eres mi hija y te amo, protegeré tu felicidad y tu vida a costa de mi propia vida de ser necesario. Pero también deseo que tengas un propósito en la vida, que estudies, que te prepares, que hables con tu padre biológico. —Siempre hablo con él, termina mal por su culpa, su deseo de llevarme al castillo a vivir con él me enferma, solo deseo que entienda que entre mis propósitos no está ser una princesa.  —Naciste con ese propósito Grecia, eres la hija de Blake, eres la nieta de los reyes, no puedes cambiar eso. — ¿Porque nunca qué te refieres a mi nacimiento nombras a papá Nick? ¿Por qué siempre me recuerdas que no soy su hija? —secando mis lágrimas, mientras algunas copas de la mesa estallaron. Ella me miró, tomando mi brazo para regresar la calma a mi cuerpo ardiente de rabia. —Nick es y será tu padre, pero llevas la sangre de Blake y aunque no lo desees tienes que cumplir con tu compromiso real. —Eres tan egoísta, siempre piensas solo en la felicidad de Rio, mientras que a mí me quieres tener encerrada alejada de todos por tu miedo a que acabe con este maldito mundo —alzando la voz, todo lo que estaba  en la mesa cayó al suelo, corrí con mucha fuerza hasta mi habitación encerrándome a llorar. Lo tenía decidido esta noche acabaría con todo esto, escaparía en busca de mi padre, he alucinado con estas voces desconocidas por mucho tiempo, he soñado innumerables veces con salir de este lugar. Fingí haberme quedado dormida, tenía un plan para salir sin ser vista de mi habitación en el templo, el único problema era mi madre y el resto de vampiros que habitaba el mundo mágico desde la unión, pero incluso eso lo tenía planeado, Salí justo a la hora que mi madre tomaba el baño de rosas,  la 1:00 de la madrugada, mi equipaje era pequeño, una mochila, con agua, un mapa, el libro y algo de pan por si sentía hambre, le deje una carta sobre mi cama a mi madre, disculpándome por no ser la hija que un día soñó que fuera, quizás mi destino estaba en otro lugar lejos de ella, me disculpaba por ser siempre tan egoísta y egocéntrica, el hecho de llevar la marca del mal nos ha condicionado a todos, le explicaba que debía hacer esto, ella entendía lo mucho que extrañaba a papá cuando se iba por meses, mi lugar estaba junto a él donde sea que se encuentre. Salí en medio de una noche, fría, de luna llena, adentrarme en el bosque en medio de las tinieblas era algo nuevo para mí, jamás había salido de noche y mucho menos sola, pero debía ser valiente si quería lograr encontrar a Asgard, se desconoce qué pasa con el cuándo se adentra en el bosque para esconderse, la criatura en la que se convirtió cuando mi madre lo mordió, fue oscura y agresiva, se aleja para no lastimar a nadie, aunque termina lastimándome a mí por no tener a mi padre durante meses. No odiaba a mi familia biológica, simplemente era parte de todas las personas que me consideran una amenaza e intentan cambiarme para que sea la princesa de un mundo al cual no pertenezco, sé que soy la hija biológica de Blake y aunque terminamos peleados porque jamás me entiende le quiero y respeto a mi manera. En el fondo de su alma inmortal conoce mis sentimientos, la conexión que tengo con Nick y Asgard es única y auténtica, no me importa si no llevo su sangre él es mi padre y sé cuánto me ama, seguramente se molestara por haber abandonado sola el mundo mágico en busca de su presencia pero no era solo por él sentía que incluso me escapaba por mí, había un mundo allá fuera que no conocía más que una leyenda sobre mí. Abrí el libro puente, aunque estaba en hebreo, días antes había traducido algunas partes importantes para abrir un portal אָב אָבַד אִבְטוּחַ אִבְטוּחַ (por la protección de este mundo pido con sangre —cortando mi dedo, «una gota de sangre en el ojo de la  portada principal»  que me lleves donde está mi padre Asgard). Aunque se movieron algunas ramas, nada sucedía, quizás papa se esconda en nuestro inmenso bosque, no era muy aplicada en clases, sentía que era una pérdida de tiempo, prefería leer libros y estaba segura que esto funcionaria, mis poderes son un desastre, aun no los se manejar bien, mi padre cada vez que regresa a casa me ayuda con mi magia, él dice que soy poderosa como Rio solo debo creerlo. Pero esta noche descubrí que me mentía, porque estaba segura de que esto funcionaria, y fui un completo fracaso, camine por horas y sentía que lo hacía sin rumbo fijo, al darse cuenta mamá no tardaría en encontrarme, tropecé y caí por un precipicio, di tantas vueltas, que ni yo misma entendía como Salí con vida de tal caída, sacudí mi ropa y revise los huesos de mis brazos. — ¡oh Grecia estás completa! —exclame en forma de burla —. ¿No se supone que estás marcada por el anciano vampiro más poderoso de todos los tiempos? Eres un fracaso —reclamándome a mí misma por mi tan estúpida falta de conocimiento en abrir un maldito portal. Mire a mi alrededor percatándome que incluso el aire era diferente ahora, ¿en dónde estoy? Camine mirando la inmensidad del bosque desconocido antes mis ojos, parecía ser otoño las hojas caían adornando el suelo de naranja, el olor era a pino fresco. —¿Quién eres? Voltee rápidamente en busca de la voz, mire aquel ser desconocido sorprendida. — ¿Tu que eres? —pregunte confundida. —Soy Henry, ¿y tú? —Henry, ¿Qué eres? —Soy un fauno, mitad humano mitad cabra ¿y tú? —Soy Grecia mitad humana bruja, mitad vampira malvada —. ¿Desde cuándo vives en nuestro bosque? Jamás hemos escuchado de ti, solo he visto fotos en los libros. — ¿Tu bosque? —mirando el libro que traía en las manos —. Estás en Roswell, en el bosque naranja de Roswell. — ¿Roswell? Ese mundo no existe. Busco a mi papá pero creo que vine al lugar equivocado. — ¿Puedo ayudarte? ¿Tu papá es Asgard?. — ¿Conoces a mi papa? —La historia de tus padres es conocida en todos los mundos, aunque no conozcas de este. Es un mundo inmenso y muy extraño, viven cualquier tipo de criaturas, hay diferentes jefes y territorios. Tu padre apareció hace un par de años aquí, cuando esta transformado va al pantano rojo, donde están las criaturas oscuras. — ¿Cómo llego allí? —No es buena idea, es un lugar oscuro y maldito, donde solo habitan criaturas del mal —comento mientras me observaba —. Debes de ser muy especial Grecia, este mundo está lleno de territorios y estás en un territorio sagrado y protegido, pero no todos pueden entrar al bosque naranja. Así que la marca de tu bis abuelo no te hace una mala persona. — ¿Cómo puedo comunicarme con mi padre? —la Diosa puede ayudarte. Sus poderes sobrepasan este inmenso bosque, aunque tu padre está cegado por la maldad y furia de Asgard. Quizás no quiera escucharte, es peligroso. —Asgard no es un demonio es el espíritu lobo más poderoso que existe, y mi padre es mago  y alfa de la manada que acabó con los Lycans, ¿conocías esta historia? —comente orgullosa de nuestra historia familiar. —Todos conocen la historia de tu familia, lo poderosos e importantes que son, pero cuando está en el pantano rojo es una criatura oscura y malévola. Vamos te llevaré con la diosa. Los aullidos retumbaban el inmenso bosque naranja, las hojas caían sobre mi  rostro. Crecí con una manada de lobos, mi padre era un lobo, mi hermano era un lobo, conocía cuando se comunicaban. Henry se acercó a mí y me puso la capucha que traía mi capa roja. —Creo que se porque estas en el bosque naranja, necesitas protección, esa manada que se acerca, es la manada de los Raksha , no son como los amigables lobos que viven en tu mundo, son malvados, y mal intencionados, estoy seguro que se acercan por ti, mantente tras de mí, ellos no tienen permitido tocar nuestros bosques, se mantendrán al límite. Los vi de reojo acercarse despacio hasta un gran árbol que supuse era el límite habían unos quince lobos, que a simple vista se veían salvaje, el alfa era distinto, su pelaje relucía tanto como el de Río, era imponente y sobrepasaba en tamaño al resto de sus integrantes, su presencia parecía consumir mi existencia, no era un lobo común, alce la mirada sobre el hombro de Henry que cubría mi rosado rostro, mis ojos hicieron contacto con los suyos, mi piel se invadió por una sensación fría y violenta, jamás había experimentado esa sensación de sentir que me faltara el aire, descubrí que herede el poder de mi madre aquella mañana, me mostraba al hombre detrás de aquel gigantesco y corpulento lobo. —Estas lejos de tu territorio Kurt —grito al otro extremo Henry —. Vamos Grecia, la diosa nos espera. Antes de emprender camino del brazo de Henry gire mi cabeza lentamente para verlo por última vez, sus ojos rojos no se apartaban de los míos, es como si quisiera de alguna manera traspasar mi alma, no era un lobo cualquiera, era un espíritu lobo, como el de papa y los tíos, es extraño, la mayoría de los espíritus escogen personas especiales para habitar sus cuerpos, ¿Qué tenía de especial este hombre descrito como un lobo malvado? ¿Por qué sentía esta sensación al tenerlo a unos cuantos kilómetros? ¿Qué había detrás de ese lobo?