XXIX Capítulo 29: Todo se acabó, y quedé destrozada. VENUS MANSON La mañana siguiente me levanté temprano, desayuné y me coloqué un conjunto cómodo, esta vez solo un pantalón con una chaqueta, el clima estaba frio, era de un color un poco más oscuro que el vinotinto y sin duda me quedaba bastante profesional. Cuando bajé lo primero que vi fue a Tim, su mirada fija en la mía a medida que me acercaba, Dios mío, lo único que quería era abalanzarme sobre él… anoche llegó a mi habitación y nos quedamos viendo una película, pero ambos sabíamos que estando juntos en una cama solos, no único que no íbamos a ver era la película. Mordí mi labio inferior bajando la mirada cuando sentí que comenzaba a entorpecer mi caminar por los nervios. Sí, anoche fue genial… como todas las noches anteriores

