Cuando llegamos a la pensión, don Paco estaba durmiendo en su silla mecedora junto a la puerta, roncaba tan fuerte que parecía un burro furioso.
- No hagas bulla para no despertarlo –me advirtió Rachele.
- Espera cariño –saqué de mi bolsillo mi celular.
- ¿Qué piensas hacer?
- ¡Shhh! No hagas bulla… -le tomé una foto sin percatarme de que el flash estaba encendido…
- ¡¿Qué carajos pasa aquí?! –se quejó don Paco al escuchar el ruido de la cámara - ¿Thomas?
- Buenas tardes don Paco.
- Creí que ya no volverías para cerrar el trato.
- ¡Cierto! –exclamó Rachele– no me contaste de que trato hablaron tú y don Paco.
- Como ya no tengo donde vivir, pensé en venir a vivir a la pensión, como tú. ¿Te parece una buena idea o debo buscarme algún otro lugar para vivir cariño?
- ¡Me parece increíble! Es como si fuéramos a vivir juntos.
- Si quieren, pueden vivir juntos –nos dijo don Paco- al fin y al cabo, son pareja.
- La propuesta es muy tentadora, pero creo que no alcanzaríamos en un solo cuarto los dos –le dije a Rachele, ella pareció decepcionarse.
- Eso es verdad.
- El cuarto piso está desocupado, yo sólo alquilo el segundo y el tercer piso, así que si quieren es suyo, sólo para ustedes –Rachele empezó a sonreír- claro que les costaría un poco más…
- ¿De cuánto estamos hablando? –pregunté.
- S/.500.00 por mes.
- No, es mucho dinero, no podremos… -dijo Rachele.
- Entonces solo alquila el cuarto que me dijiste, Thomas, serían S/.90.00 soles semanales, ya que, por ti no tengo cariño como por Rachele.
- ¿Nos da unos minutos por favor don Paco?
- Claro muchacho, suban y conversen, yo los estaré esperando aquí.
En el camino hacia el cuarto de Rachele, ella no dejaba de decirme que era mucho dinero, pero no me preocupaba; estaba seguro de que la convencería de que alquilemos el cuarto piso.
- ¿Cuánto pagas tú por este cuarto? –le pregunté.
- S/.30.00 soles a la semana…
- Eso es equivalente a S/.120.00 soles por mes, mientras que a mí me cobraría S/.90.00 soles semanales, que al mes serían S/.360.00 soles y entre los dos estaríamos pagando S/.480.00; si pongo tan solo S/.20.00 soles más, estaríamos alquilando todo un piso, cariño –Rachele parecía entenderme perfectamente.
- Creo que don Paco se equivocó al decirnos la cantidad a pagar…
- Seguro, pero antes de hacer el contrato debemos ver que el cuarto piso esté en buen estado.
- Claro
- Pues vamos a decirle a don Paco que nos muestre el cuarto piso cariño…
- Espera, no sé si estamos haciendo bien, nos conocemos muy poco para ya vivir juntos y no quiero que llegué un día en el que tú te aburras de mí…
- Hey –le agarré de los hombros– eso no pasará cariño. Sí, es muy pronto para vivir juntos, pero si nunca es tarde para empezar a hacer las cosas bien, creo que nunca es demasiado temprano para arriesgarse; y yo quiero arriesgarme a ser feliz, contigo.