La tragedia de Sablyer

Capítulo 7

Alice se despierta cerca de la noche, le tocaría trabajar porque Daniel estuvo estudiando para sus exámenes finales. Ella se tomaba de su frente cansada.

—Ése trabajo es un asco—espetó.

Daniel le trajo café.

—Lo sé, pero mis padres comenzarán a molestarme por tu hermano también...

—¿Lo has traído también?

—Sí, pero duerme en la sala y solo de noche, no está de día, él piensa que Jack está aquí así que monta guardias...

—¿Y porque no me dijiste eso antes?—dijo Alice despertándose rápido y tomando el café.

—Porque no es posible, de serlo, ya se hubiera presentado.

Alice lo mira fijamente a los ojos mientras se recogía el cabello.

—¿Sabes el poder que tiene Jack sobre mi otra parte, verdad?

—Creí que me amabas en todas tus partes.

—Lo hago, pero Alice no es una parte mía, es una voz. Ni siquiera tiene poder, pero sé que Jack es manipulador, hará algo o dirá algo y mi otra Alice se disociará...

—¿Acaso no puedes controlarlo?

Ella negó con la cabeza y lo besó rápidamente mientras apurada tomaba su mochila.

—Iré a ese bar de imbéciles—dijo sonriendo—.Dile si ves a Viscencius que tenga cuidado, cuando se trata de Jack, siempre debe tener cuidado.

Amén de lo dicho, se dirigió al trabajo. Le había costado aprenderse los caminos que llegaban a ciertos lugares, pero tomaba de referencia el negocio del señor Dadley, lo que era un error.

—¿Hace cuanto lo conoces?—le preguntó Shawn a Alice refiriéndose a Daniel.

—Hace poco—se limitó a decir ella mientras le daba un trago a un sujeto y Shawn preparaba el siguiente pedido.

—No he conocido ninguna chica por su parte—comentó él al azar.

—Quizás no quería exponer su vida privada—respondió vagamente Alice.

—¿Y tú lo quieres o solo lo estás usando?

Ella lo miró de frente.

—¿En que lo usaría?

—El pueblo es pequeño, digo, quizás solo estás parando en su casa pero eres alguien más bien de camino.

—¿Que dices?

—Eso, ya sabes, gente que está solo un tiempo y luego se irá...

Ella lo relacionó con su época, así que dejó de trabajar.

—Me iré antes...

—Mira, si es por lo que dije...

—No importa, enserio—interrumpió ella tomando la voz que se le quebraría.

Cuando salió del bar comenzó a caminar llorando a la casa de Daniel. Shawn tenía razón, ella era una chica de camino, al final ella y Daniel jamás podrían ser, ¿cómo podrían? Ella no es de su época y Daniel no dejaría a sus seres queridos por solo una idea de romance.

El anciano Dadley estaba tirando basura cuando ella se choca con él por accidente.

—Ey, ¿porque lloras?

Ella no respondió y secándose las lágrimas solo se limitó a pedirle perdón.

—Me recuerdas a mi hija—espetó el hombre.

Algo en ella no se sentía bien. Dadley no parecía ser quien era, pero no sabía como podría darse cuenta que era exactamente.

—¿Quieres ayudarme con la otra bolsa? Es más grande y tengo problemas lumbares...

Ella asintió sin mucho pensar, no sabía que significaba tener problemas lumbares pero estaba enojada con la situación en que se encontraba su vida respecto al romance. Quizás debía dejar ir a Daniel.

Y entonces, todo lo que Dadley le causaba, se hizo presente. El hombre la tomó desde atrás haciéndola dormir. Cuando despertó, solo estaba sentada y atada en un cuarto de refrigerios.

La carne estaba podrida o algo debía haber muerto allí porque olía a lo peor que alguien podría respirar con la boca tapada.

El sujeto se hizo ver y la tomó, ella forcejeó un poco, pero Dadley tenía más fuerza y trajo una especie de colchón de perro, la llevó hasta allí y Alice pudo vislumbrar una bolsa llena de sangre que apestaba, debía ser aquello que pidió que lo ayudase a sacar.

El anciano se puso encima quitándole con fuerza casi arrancándole los boxers de Daniel, así que solo quedó su vestido, y él lo levantó, y allí, entró en ella. Una vez, dos veces, tres veces y ella solo lloraba, tenía algo de tela en forma de puño en su boca, sus alaridos no se escuchaban y allí se dio cuenta, la otra Alice debía tomar el control absoluto de su cuerpo.

Con una fuerza ensimismada por salir, Alice dobló su cuerpo para que el anciano ya no pudiera penetrarla y lo pateó con fuerza, luego arrojó la silla en la que estaba sentada y con las manos atadas se las arrojó a Dadley tantas veces que Dadley aunque esquivaba, ella no dejaba de tirarle la silla y patearlo, hasta que de golpe, Dadley cayó contra la puerta del frigorífico, comenzó a sangrar mucho, él tenía las llaves en el bolsillo, lo que alcanzó a liberarse.

Todos los hombres en esta época se quejan de la barbarie de épocas atrás, pero el señor Dadley había descuartizado a alguien y pensaba tirarlo a la basura como si no valiera nada, y quizás ella hubiera tenido el mismo final si no fuera porque volvió con Shawn y pidió que llamara a la policía.

El bar se cerró, el vecindario salió, y Daniel fue la primera persona que Alice abrazó, pero su otra Alice le murmuró; ''Él no estuvo para ti'' y era cierto, ni su hermano, ni Daniel ni el mismísimo Jack podrían comprender lo que fue estar encerrada en un frigorífico con un anciano metiéndose en ella. Nada volvería a ser lo mismo, ningún abrazo, ningún recuerdo, ni caminar sola por las noches. Casi podía sentir el suspiro de Daniel en su cuello y aquello solo le recordó a Dadley. Nadie entiende a las chicas cuando lloran, nadie entiende a las chicas cuando algo malo les sucede, porque nadie entiende a las chicas.

Alice volvió a la casa de Daniel, donde sus padres le ofrecieron toda la estadía que necesitara, pero ni Daniel se veía igual. Nada se ve igual después de tener un anciano encima tuyo e intentar gritar con todas tus fuerzas, nadie se siente la oscuridad en la que quiso marchar, pero su hermano la abrazó con todas sus fuerzas.

—No te vayas...

Ella solo silenció.

—Te prometo que hay más mundo que mereces conocer, y no es ese desgraciado—dijo Viscencius mientras ella se encontraba muda y viendo como Dudley era transportado por los policías, muerto. Se había hecho un hueco en la cabeza y perdió mucha sangre, pero luego siguieron revisando y encontraron lo que apestaba, pero para entonces ella estaba siendo trasladada a declarar.

Solo quería irse a la oscuridad, pero su hermano la necesitaba. ¿Sería capaz Alice de hacer caso omiso a su pedido o sería fuerte y se quedaría en este horrible mundo moderno?