CERO.
Big Eyes.
Las luces neón brillan sobre mi cuerpo aceitado.
Los ojos verdes me persiguen con cada movimiento, nunca puedo verlo por completo, siempre está en el rincón oscuro al fondo del bar, no sonríe, no se mueve, solo observa. Soy un maldito animal de zoológico y él es quien lanza los manís sobre mi cabeza para molestarme.
Extrañamente, aunque nunca he visto más allá de sus duros ojos, forma parte de mi show cada noche, imagino que somos los únicos en el lugar, que tenemos un oscuro secreto, que sabe quién soy y todavía le parezco atractiva.
Me deslizo sobre la barra de metal con los gritos de estos asquerosos hombres que gritan palabrotas para mí.
Sonrío con picardía cuando me pongo de rodillas girando la cabeza en círculos, mi cabello falso baila conmigo, sin importar cuan libre baile, cuanto finja que soy dueña de mí misma, sigo atrapada en este cuerpo, mi alma esta en este bonito frasco de ojos azules, ajena a todo lo que pasa en el mundo exterior, encadenada a una habitación en el fondo del club clandestino en el que vivo.
Mi vida tiene un precio muy alto y nadie esta dispuesto a pagarlo.
Excepto tal vez por mi hermano desaparecido.