Revuelo

1278 Words
Cuando por fin llegamos a la piscina, que está vacía solo para nosotros (algo que, sospecho, esta arreglado), Harrison no puede evitar lanzar sus comentarios doble sentido. -Vaya Tom, tu cabello se ve más radiante-lanza con burla. Lo fulmino con la mirada. -Hazza, cállate-le dice Tom entre dientes, y señala con la cabeza a Paddy, que nos mira sin entender nada. Caminamos hasta las reposeras y dejamos nuestras toallas en ellas, junto a Martin y Zendaya. La piscina esta al aire libre pero techada con un toldo amarillo pastel, que impide que el sol nos llegue directamente. Corre una brisa refrescante, pero el calor aún se siente. Zendaya se voltea a mirarme y se quita sus gafas de sol. Me da una mirada y levanta sus cejas. Ruedo los ojos en respuesta, y ella se ríe. Me recuesto en la reposera y cruzo mis piernas. -¿Qué hacen allí sentados? Es hora de jugar-reclama Sam, deteniéndose delante de nosotros y colocando sus manos en su cintura. -En un rato, debo tomar sol-dice Zendaya sin siquiera mirarlo. -El sol no te llega, estamos cubiertos-replica Harry. Zendaya gruñe y se sienta en la reposera, para mirarlo. -No quiero jugar ¿entendido?-espeta ella. -Vamos, Z, no seas aguafiestas-le digo mirándola. Se voltea para encararme. -Pensé que me apoyarías en esta-dice, bajándose las gafas para mirarme fijamente. -Un simple juego no nos vendría mal. ¿Cuándo fue la última vez que estuvimos todos juntos?-le pregunto. Resopla. -Está bien, vamos-dice, y se levanta. Se gira y mira a Martin.- ¿Qué haces? Ponte de pie. -El agua debe estar helada-dice Martin. Zendaya lo jala del brazo y lo obliga a levantarse. Me rio al ver a mi mejor amigo. -Si yo juego, todos juegan-dice Zendaya, y luego me da una mirada a mí y a Tom- TODOS. Me levanto de la reposera y deshago el nudo del pareo. Tom toma mi mano y me detiene. -¿Qué pasa?-pregunto. El me mira con una sonrisa ladeada que me quita el aliento. -¿Qué te parece si nos sacamos una foto antes?-pregunta. Sonrío y asiento. -Me encantaría. Toma su teléfono y abre la cámara. Con su brazo libre me rodea la cintura por detrás, pegando mi espalda a su pecho. Apoya su mejilla en mi cabeza y sonreímos a la cámara. Saca varias fotos así. Luego, se agacha un poco y me da un beso en la mejilla. Cierro los ojos. Luego, separa sus labios de mi mejilla y me da un corto beso en los labios. Me sonrojo y abro los ojos. -¿Te molestaría si la subo a **?-pregunta. Mi sonrisa desaparece. -No… pero me da un poco de miedo-le confieso. ¿Por qué? -Por tus fans. Sera la primera vez que publiques una foto de nosotros-le explico. -Todo el mundo lo sabe ¿Qué puede pasar ahora?-pregunta. Miro el suelo y después suspiro. -Está bien. Envíamelas, yo también quiero subir una-digo. Me mira sorprendido. -¿De verdad?-pregunta. -Sí. Tardamos unos minutos en subir las fotos y luego, dejamos los teléfonos en las reposeras y nos lanzamos a la piscina. -¿Marco polo?-pregunta Paddy. -Tú empiezas-le dice Harrison. Paddy comienza a llamarnos y me atrapa enseguida, digamos que no soy muy buena arrancándome, en especial cuando el pobre Paddy está en clara desventaja, ya que es el único que no toca al fondo de la piscina y todos los demás lo evadían con facilidad. Tardo más que Paddy, pero logro alcanzar a mi mejor amigo. Comienzo a arrancar. Lejos el más tramposo es Sam, que se la pasa prácticamente todo el tiempo fuera de la piscina. Harrison no deja de molestar a Martin, colocándose súper cerca y arrancando al último minuto. Pero finalmente, mi mejor amigo lo atrapa. Nos coordinamos todos para salir de la piscina y dejar a Harrison solo en el agua. Sam, Harry, Tom y yo nos encargamos de colocar los pies en el agua y moverla para confundirlo, mientras que Zendaya lo graba con su teléfono. Paddy y Martin le lanzan agua desde una orilla. Al cabo de diez minutos, Harrison se rinde y abre los ojos. Cuando nos ve, nos reímos a carcajadas y el coloca una expresión enfurruñada. Comenzamos a hacer luchas en la piscina. Tom me levanta en sus hombros, Martin levanta a Zendaya, Harrison levanta a Paddy y Sam levanta a Harry. Me caigo unas mil veces, aunque me siento paga de mi misma cuando por fin logro hundir a los gemelos, en especial por lo tramposos que eran. Atacaban por detrás, y no al que estaba arriba, sino que les empujaban las piernas a los que estaban abajo. Cuando nos cansamos, nos quedamos nadando con tranquilidad y conversando. Hago carreras con Paddy, luego con Harrison y finalmente con Zendaya. Después, me aferro a la espalda de Tom y lo molesto, haciéndole cosquillas. Fue como si nunca hubiesen pasado los tres meses, como si estar juntos fuera lo normal, lo que hacemos día a día. No me había dado cuenta cuanto extrañaba estar así, no solo con Tom, sino con su familia, Hazza, Martin y Zendaya. Éramos como un gran grupo de amigos. Cuando solo quedamos yo y Tom en la piscina, ya que a los demás les ha dado frio y se han salido, nos quedamos flotando y conversando tranquilamente. -¿No podrías quedarte unos días más?-pregunta él. Niego con la cabeza y hago una mueca. -Imposible. -¿Ni siquiera para tu cumpleaños? Me siento fatal por no poder estar contigo ese día-me dice Tom, haciendo un puchero. -No me gusta mucha celebrar, ya te lo he dicho. Además, sé que si pudiésemos saldríamos. Podemos celebrarlo después-le digo. Me acerco a él peino su cabello mojado con mis manos. -¿Y qué hay del mío? ¿Crees que vas a poder ir a Londres?-pregunto. Hago una mueca y me encojo de hombros. -No lo sé-admito apenada. Tom hace un puchero y suspira. -¿Cuándo te llegan noticias de Oxford?-pregunta de pronto. -El nueve de mayo-replico. -¿Una semana después de tu cumpleaños?-pregunta. Asiento.- Que te aceptaran sería un excelente regalo -Ya lo creo-le digo sonriendo. Tom se inclina. Sus manos sostienen mi cintura, mis manos sueltan su cabello para atrapar su cuello. Con lentitud dejo que sus labios, ahora fríos por el agua, se posen sobre los míos. -Eh, tortolos-grita Harry. Nos separamos y miro de mala gana a Harry. -¿Qué quieres, enano?-pregunta Tom. -El teléfono de ______ parecer estar a punto de explotar-dice Paddy preocupado. Frunzo el ceño y miro a Tom. Este me mira sin entender y se encoge de hombros. Nadamos y salimos de la piscina. Me acerco a la reposera y cojo mi teléfono. Me llegan cientos de notificaciones de **, tengo varios mensajes de la agente que Tom me ha conseguido (y que claramente me parece una pérdida de dinero, ya que no he aceptado nada). Abro mi teléfono y miro las notificaciones. -Wow-susurro. -¿Qué paso?-pregunta Zendaya. Tom coloca una toalla en mi espalda y se queda junto a mí, mirando la pantalla. -Me parece que nuestra foto ha dado de que hablar-susurra Tom. Millones de me gusta, millones de comentarios, miles de mensajes privados. Y eso es solo el mío, no puedo imaginarme el de Tom. No leo los comentarios, ya que se cuan hirientes pueden ser. Abro w******p y leo los mensajes de “mi agente” (aun no me acostumbro a llamarla así). Al parecer, quieren entrevistarnos a nosotros juntos. -Vaya Tom-susurra Harrison, que tiene su teléfono en la mano.- Parece que tu fotografía es trending topic en twitter. Miro a Tom algo preocupada. No es exactamente la clase de atención que yo buscaba. Sin embargo, ¿Por qué no puedo mostrar lo feliz que soy con mi novio? Tengo el derecho a hacerlo, y es más quiero hacerlo. Abro la cámara de ** y levanto el brazo. -¿Qué haces?-pregunta. -Un boomerang-le digo. Lo miro. Luce sorprendido, pero luego sonríe y toma mi teléfono, ya que tiene el brazo más largo. Y refregándoles en la cara a todo el mundo lo felices que somos, nos damos un beso y lo subimos a mis historias.
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