El amor lo puede todo? Tom Holland y Tu

Cronicas de un escandalo

Intento pensar en las decisiones que me llevaron a aquel punto. Todo comenzó por la mañana… no, eso es mentira. Todo comenzó ayer por la tarde, cuando converse con Claudio. No, borra eso. Todo comenzó cuando nací.

Ok, tal vez me fui un poco al extremo. El punto es que, de todas las cosas para las que me había preparado en mi vida, esta, increíblemente, no la vi venir. No sé cuándo decidí ignorar el hecho que, desde que mi relación con Tom se hizo pública, paparazis me seguían 24/7, sin descanso.

Mi día había empezado como cualquier otro sábado. Me desperté a las nueve, le di comida a Thor, prepare mi desayuno y baje un trozo de pescado congelado para el almuerzo. Mis padres duermen hasta las doce los sábados, por lo que las mañanas son prácticamente para mi sola. Me senté en el viajo sillón de la terraza, con Thor a mi lado, mirando hacia el patio, con una taza de café humeante, que había endulzado con miel. Puse mi Tablet en mis piernas y comencé a ver, por enésima vez, Grey’s Anatomy. Nada que anunciara como mi día, y mi vida, se iba a ir a la mierda.

Cuando mis padres por fin bajan y se sientan a desayunar, me levanto y me dirijo a mi baño para ducharme. Me vestí con mi típico buzo y comencé a estudiar.

Mi padre me llamo a almorzar, baje. Comimos y charlamos un poco acerca de Oxford. Ayude a lavar los platos. Guarde mi ropa lavada. Volví a estudiar.

Se cae mi lápiz. Lo recojo. Noto que mi teléfono, que había dejado cargando durante la noche, nunca se cargó y está muerto. Lo conecto. Miles de mensajes, cientos de llamadas pérdidas.

Una foto. Yo y Claudio, abrazándonos.

-Mierda.

Leo los mensajes de Zendaya, luego los de Martin, Harrison, y finalmente los de Tom. Mi respiración se agita. Malditos paparazis, malditas revistas.

Rumores de infidelidad, Zendaya desesperada intentando calmar a Tom, Martin advirtiéndome de que se convertirá en un asesino e ira a por la cabeza de Claudio, Harrison queriendo contactarme porque le parece sospechosamente horrible que hay desaparecido justo después de la fotografía.

Llamo a Tom. Al segundo pitido contesta.

-¿Si?-pregunta, con tono molesto y serio.

-Mi teléfono… murió, nunca cargo, y acabo de notar el escandalo con la foto-digo apresuradamente, trabándome.

-Eso no explica por qué existe esa foto-dice, con una calma alarmante.

-Te dije ayer que habíamos hablado-replico.

-¿Y por qué lo abrazaste?-pregunta.

Abro la boca para responder, pero luego la cierro. No quiero sonar molesta con su actitud, aunque ciertamente lo hace un poco. Si el llegara a abrazar a su ex novia… si, me pondría celosa, pero lo entendería. Hace mucho tiempo hubo un vínculo que los unió, eso no significa que hayan sentimientos.

-Nos estábamos despidiendo-digo finalmente.

-¿Despidiendo? ¿Es que acaso se va a algún lugar?-pregunta, denotando su molestia.

-Dejara de molestarme, dejara de… estar ahí. Me deseo suerte para Oxford. Tom, no es nada más que un abrazo-explico.

Lo escucho respirar del otro lado de la línea telefónica. Quisiera poder decirle algo más para que lo entienda, pero realmente no encuentro las palabras. No puedo creer todo el alboroto que una maldita foto puede causar. Pero por más que piense en lo que debería haber hecho ayer, mientras hablaba con Claudio, nada hará que el tiempo vuelva atrás. Debo arreglar las cosas ahora.

-Yo… necesito pensar, hablamos más tarde-dice Tom.

-Tom-digo, pero antes de que pueda seguir, el cuelga.

Me dejo caer de espaldas sobre el suelo. No puedo echarme a llorar, no ahora. Debo pensar. Marco a Zendaya, que me contesta de inmediato.

-¿Qué demonios paso? ¿Explícame porque estabas con ese? ¿Engañaste a Tom? ¿Te rapto ese psicópata y por eso no contestabas? ¿Hablaste ya con Tom?-me bombardea de preguntas Zendaya.

-Es un simple abrazo, hablamos y se despidió, me deseo suerte en Oxford. Mi teléfono había muerto, el maldito cable no estaba bien conectado y no cargo. He hablado con Tom, me ha escuchado, pero luego colgó. Por favor, dime que se te ocurre una manera de arreglar esto-explico apresuradamente. Zendaya suspira.

-Hay mil versiones diferentes. Todos saben que es tu ex novio. Hablan de que has terminado con Tom para volver con él, hablan de que engañaste a Tom con él, incluso algunos dicen que engañaste a este tipo con Tom-dice Zendaya. Yo la escucho atentamente.- Creo… yo no sé cómo solucionar esto. Si tú y Tom estuvieran juntos en este momento, les diría que hicieran un video junto aclarándolo todo.

-Pero él está al otro lado del mundo-sentencio.

-Exacto. Además, está bastante molesto de que te hayas visto con ese.

 -Lo sé, y lo entiendo-digo. Suspiro, intentando no dejarme llevar por el pánico.

-Oh, espera-dice de pronto. Frunzo el ceño y me siento de golpe.

-¿Qué sucedió?

Silencio. Comienzo a sentir que la desesperación invado por completo mi cuerpo. Quizás ahora inventaron que me fui a marte con él. De las revistas, me espero cualquier cosa.

-Tu ex-dice de pronto Zendaya.

-¿Qué hay con él?-pregunto.

-Ha publicado una declaración en r************* -dice.

Voy a asesinarlo digo para mis adentros. Claro, el planeo esto desde el principio, quizás el mismo llamo a los paparazis. Maldito sea el día en que me fije en él. Lo busco en **, ignorando las millones de notificaciones con mensajes de odio que tengo en este, y leo su última publicación, que es un texto largo en español y en inglés.

“Con respecto a la fotografía que hay de mi junto a ______ abrazándonos, quiero decir que ella es mi EX novia, que nos encontrábamos hablando ya que yo no he sido la mejor persona estos últimos meses, y me estaba disculpando con ella. Tanto ella como yo hemos seguido adelante, no tenemos ninguna relación más que como conocidos, y ella se encuentra feliz junto a su novio, Tom Holland. Espero que dejen de lanzar rumores acerca de infidelidades, ya que ella es la persona más integra que conozco, y no merece las acusaciones que le hacen”.

Boquiabierta, vuelvo a leer. Jamás pensé que el fuese capaz de hacer eso. Zendaya habla, pero yo sigo paralizada, asimilándolo.

-Tal vez ahora lo odio un poco menos. Espero que aclare todo, aunque ya sabes, los medios son bastante retorcidos. Es muy bueno que te haya halagado. “la persona más integra que conozco”, es un gran cumplido-comenta Zendaya.

-Hazme saber si los medios cambian los rumores-le digo, y antes de que pueda decirme algo, cuelgo.

Me levanto del suelo y me recuesto en mi cama. Parte de mí se siente aliviada y agradecida de que, por fin, Claudio haya hecho algo bien. Pero también me siento molesta de que mi novio no sea capaz de ver lo que Claudio sí. No soy la persona “más integra” del mundo, pero ¡Vamos! Jamás podría serle infiel a alguien, no después de que a mí me fueron infiel, y se cómo se duele la traición de la confianza. Entiendo los celos, de verdad que sí, pero que dijera que necesita pensar, es como si realmente estuviese analizando si me cree o no.

Mi teléfono vuelve a sonar. Me asomo por el borde de la cama para ver la pantalla, es Tom. Suspiro.

Esta vez, soy yo la que necesita pensar.