Capitulo 52

1282 Words
Victoire Jussieu Tras bajarme del auto no puedo evitar adelantarme hasta estar delante de mi hermano, quien a pesar de todo lo que me dijo lo permite para tenerme más tranquila, por otro lado los chicos se ponen a mis lados protegiéndome al igual que los guardias y por unos momentos no los entiendo pero al llegar a donde está el jet de Claudio si lo hago. El ya está afuera acompañado de muchas personas al igual que yo, su expresión de seriedad no cambia al momento de vernos y debo decir que me sorprende en gran manera que no lo haga, por lo general tiene una sonrisa burlona en el rostro cada vez que me ve, pero esta vez no, es como si el hecho de hayamos pedido reunirnos con el sea algo de que preocuparse, al contrario, nosotros estamos preocupados porque haya aceptado tan a la ligera, porque eso solo significa que se trae algo entre manos. O como dijo Sergio, le tiene un cariño que no podemos entenderlo, porque si, puede que sea mi hermano pero eso no quita que el fue entrenado por el durante cinco años, es como si hubiera tenido un hijo y lo haya criado hasta cierta edad, y que luego este se vaya al bando enemigo. Claro que viéndolo de esa perspectiva no estaría del todo contenta con ello, es bastante difícil. Al llegar frente a Claudio me adelanto para hablar primero, la expresión en el rostro de Sergio tampoco cambia al ver a su ex mentor sin embargo se nota que ambos quieren dirigirse la palabra aunque se contienen. -Claudio, gracias por aceptar reunirte con nosotros-agradezco con tranquilidad demostrando que no venimos a pelear-Te hemos llamado porque anoche tuvimos un ataque a la mansión y la única persona que pudo haberlo hecho eres tú. El ceño de Claudio se frunce al escucharme y niega con la cabeza al darle una mirada a una de las personas que lo acompañan. -Si hubiera sido yo ciertamente no estaría aquí esperando un disparo, además creo haber demostrado que ya dejé eso hace un tiempo-asegura y tiene sentido, me parecía muy extraño lo fácil que aceptó vernos pero al menos sabemos que se debe a que no tiene nada que ver. Pero entonces surge la gran pregunta de... ¿Quién fue? Porque no tenemos muchas personas queriendo matarnos constantemente, mucho menos con las agallas suficientes como para destruir mi casa, así que me pregunto si estará diciendo la verdad o solo esta fingiendo para zafarse de la culpa. Miro a Sergio en busca de respuesta pero el ya estaba esperando la pregunta silencio que le hago, un asentimiento de su parte es todo lo que necesito para saber que es verdad, sin embargo ahora me quedo sin opciones. -Gracias por tu cooperación, cuando necesites algún cargamento puedes dirigirte a Sergio y el se encargará de proporcionartelo.-termino y Claudio levanta las cejas con sorpresa. Estamos básicamente firmando un acuerdo de paz silencioso del cual me siento aliviada, sin embargo no estoy del todo tranquila porque aún no sabemos quien es el que ocasionó el incendio. Regresamos a los autos en silencio y sin problema alguno mientras mi mente trabaja a toda velocidad, el incendio fue algo demasiado rápido, además de que les salió demasiado bien para tratarse de un novato, debe ser alguien que nos conoce muy bien, también la casa, aunque creo que ir allí sería de ayuda para seguir investigando. Le pido a Sergio que maneje hacia la casa y este sin decir nada lo hace, mis ojos se mueven por la ventana en silencio mientras pienso en posibles opciones, personas que hayan querido esto, o también posibles enemigos que hayan vuelto, sin embargo no se me ocurre nadie. El único que estaba en mi lista era Claudio y una vez confirmado que el no tiene nada que ver, además de que parecía no saber nada al respecto, me quedo sin opciones. Al llegar a lo que era mi casa bajamos sin titubear, ya está amaneciendo por lo que se pueden ver mejor los restos del incendio, me muevo por los escombros observando desde donde comenzó el fuego y noto que este se extiende también por una de las paredes la cual está casi intacta, abro la puerta secreta que está ahí y al hacerlo me sorprendo al notar que no salió ilesa, alguien entró e incendio también dentro pero de manera que el fuego no afectara también la pared. O mejor dicho, la puerta secreta que parecía una de las paredes. Lo que no me termina de conectar es que como lograron descubrir esto si hicieron todo tan rápido, eso solo me hace pensar que quien quiera que sea conocia demasiado bien la casa como para incendiar incluso en las partes no superficiales. Eso me preocupa aún más porque quiere decir que puede haber un traidor entre nosotros y que puede que no estemos prestando total atención. Entre nosotros no puedo pensar en una persona capaz de traicionarnos de esa manera, ni siquiera por dinero, porque todos aquí despues de tantos años trabajando para mi tienen suficiente dinero para vivir tranquilos el resto de sus vidas, aún más los de mi confianza, es por lo que no puedo siquiera pensar ni en una persona ni en una razón en concreto por la cual alguno de ellos haya podido hacerlo. Simplemente no me cabe en la cabeza. Me doy la vuelta sintiendome demasiado cansada y subo al auto de nuevo, necesito que volvamos al bunker, por lo menos por hoy necesito un poco de paz entre tanto desastre que pasa en mi vida, por un momento sentí que todo iba tan bien, había conseguido que mandaran a la cárcel al líder de la red de prostitución, me habia reconciliado con Nard y... esperen. Muevo mi cabeza hacia Nard quien alza una de sus cejas en mi dirección, la curiosidad tiñe sus facciones y la sorpresa en las mías solo la aumenta. ¡Eso es! ¿Por qué no había pensado en eso? -Acabo de delatar al dueño de una de las redes de prostitución más grandes de Francia, esto pudo haber sido una represalia por lo de anoche-explico y Sergio me da una mirada de sorpresa. -¿Como hacen eso desde la cárcel? -Eso es lo de menos, los policías son muy fáciles de comprar, no me sorprende que salga pronto de ahí, lo que tengo es que impedir que lo haga. La mirada de Charles se posa sobre mi con la pregunta clara en sus ojos. -¿Como se supone que harás eso? -De la misma forma en la que el querrá escapar, el dinero mueve a los policías, tengo que ofrecerles a cambio de que no acepten ningún soborno de el por más generoso que sea, por sus delitos dudo mucho que vayan a dejarlo libre bajo fianza así que será fácil el resto. Todos parecen divertidos al verme emocionada por mi reciente descubrimiento pero entonces el cansancio comienza a hacer de las suyas, espero pacientemente tratando de no dormirme mientras llegamos y una vez lo hacemos soy la primera en bajar seguida de Nard quien me acompaña hasta que estamos dentro de bunker. Mi ama de llaves nos alimenta dado que salimos tan rápido que ni siquiera comimos lo que hizo, después de un regaño por su parte comemos y ya el cansancio por no haber dormido la noche anterior comienza a pasarnos factura, nos distribuimos las habitaciones que hay y Leonard se viene conmigo a la mía, entro en el baño para darme una ducha y una vez lo hago me pongo un pijama cómodo, no tengo fuerzas para nada.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD