Prologo
Aproximadamente 2000 años atrás, un demonio muy poderoso invade la tierra estableciéndose en ella para después crear descendencia. Esto no le gusto a los arcángeles que decidieron preparar a una diosa para enviarlos al infierno de nuevo, los años pasaron y la diosa bajó a la tierra a acabar con la destrucción del Demonio que vivía actualmente en ella.
Lo que nadie esperaba es que aquella diosa se enamorara de ese demonio, no era cualquier demonio, sino el que sería el siguiente en la cadena a ser el líder del inframundo, uno bastante poderoso. Los arcángeles enojados con esta diosa, le tiraron una maldición, condenándola ocupar otro cuerpo cada vez que la historia se volvía a repetir, si no logra asesinar al demonio actual de esa generación.
De ahí surgió la leyenda:
Dice la leyenda que el rey del infierno ascendió a la tierra cuando todavía todo era oscuridad. Aún no existía la luz que se conoce actualmente. Aburrido de ver todo oscuro y enojado con Dios por echarlo del cielo. Decidió robarle todo el poder de la creación. Llenando de luz y vida a la tierra y logrando enojar aún más a Dios.
Hubo un enfrentamiento entre una diosa y el demonio por varios días, para lograr erradicar el error de la futura creación de Dios.
Pero el demonio no era tan malo y cruel como le habían hecho creer a la diosa. Si no que tenía un corazón puro y lleno de bondad.
Ella, al ver eso, se enamoró del demonio. Los arcángeles se encontraban enojados por como sucedieron las cosas, así que decidieron tomar venganza y obligarla a asesinarlo por generaciones.
Y eso nos lleva a la situación actual.
—Es una historia muy triste, cariño—Max cierra los ojos—. Estoy listo
—No soy tu cariño, soy la diosa Analia—Disparó el arma celestial enviando al demonio al infierno.