Capitulo 8

1592 Words

Lucas No siempre podemos controlar lo que sentimos. Y esa es una maldita realidad que me está partiendo por dentro. Melissa se fue, se fue a Denver con su hermano y Olivia, buscando espacio, aire, paz. Y yo… yo me quedé aquí, en este pueblo que parece más grande ahora que ella no está, en esta casa que se siente más vacía, aunque esté llena de ruido. Han pasado 2 días desde que la vi en la plaza, dos días desde que nuestras voces volvieron a subir de tono, desde que sus ojos se llenaron de lágrimas que esta vez no pude detener, y desde que me dejó claro que necesitaba irse para no romperse más. Y, aun así, cada vez que cierro los ojos, la veo. A veces la escucho reír, o siento sus manos en mi espalda, su perfume en el aire, la forma en que me decía “Lucas” cuando estaba cansada de

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD