Melissa Después de hablar con Ethan en el jardín, me quedé en la banca, sola, abrazando las piernas contra mi pecho. No había muchas respuestas en mi cabeza, pero sí había muchas emociones, demasiadas, quizá. Dolía ver esas fotos, no porque creyera que Nick me había traicionado, sino porque por un momento, sentí que el pasado regresaba para arrebatarme la paz justo cuando comenzaba a encontrarla. Lo más cruel fue que… me hizo dudar de mí, no de él, de mí, de si realmente era suficiente. De si alguien como él —con su sonrisa, con su mundo nuevo, con toda una vida esperándolo allá afuera— se quedaría con alguien como yo… con mis inseguridades, mi historia a medio cerrar, y esta herida que aún no termina de cicatrizar. Más tarde, mientras ayudaba a mi madre en la cocina, rompí el silenc

