— Entiendo creo que deberíamos empezar a plantear nuestra negociación —Le digo mirándolo fijamente.
— Me temo que no siento la necesidad de ir tan rápido me gustaría conocerla mejor antes de contarle mis planes para la negociación con usted.—Dice mirándome arrogante.
— Lo siento creo que le di la impresión equivocada, estoy en este lugar única y exclusivamente para hablar de negocios.— Digo cruzándome de piernas
— Me temo que me gusta conocer a mis socios antes de incluirlos en mis negocios
— Dejémonos de formalidades puedo notar que usted ya sabe la información de cada uno de los presentes puedo notarlo porque fue directo al punto sin perder tiempo en toda la velada evadiendo a los menos adinerados, haciendo a un lado a los menos influenciables, hablemos directamente al grano yo estoy buscando un socio con determinación, dispuesto a cumplir y hacer cumplir, su empresa de aviación en las islas de Miami son mi mayor interés. — Le digo dejando las cosas claras entre nosotros
— Déjeme decirle que es usted una mujer muy observadora, pero hay algo que no puedo dejar pasar y es el hecho de que realmente no sé nada de usted, es como si no existiera — Dice tratando de analizarme.
— Cómo ya le dije no estaba destinada a venir a este evento sin embargo la búsqueda de una gran negociación llamó mi atención sin dudar, usted conoce cada una de estas personas puedo notarlo con simple verlo caminar de un lado al otro, pero no tenemos que conocernos a fondo, en fin, solo son negocios.
— Entiendo, me agrada su determinación, pero como usted entenderás debo conocer primero a mis nuevos socios y por lo tanto me gustaría invitarla a cenar mañana por la noche, pienso que será una gran oportunidad para conocernos y poder preparar una propuesta excitante para usted — Me dice pícaro con sus ojos puestos en los míos le expreso una sonrisa sarcástica dejándolo de mirar.
— Entonces si no hay más nada que decir a las 6 entonces — Digo sin resistirme, el hombre realmente es difícil.
— A las 6:00 sin falta, ahora me gustaría brindar por nuestra nueva asociación.
— Me temo que aún no hay ninguna asociación entre nosotros, si me permite no quiero ser mal educada Pero así como usted, yo también soy una mujer de palabra y mis promesas las hago cumplir así que me temo que debo dejarlo, prometí platicar con aquel joven, tiene una gran propuesta de expansión para mí, y me gustaría escucharlo. — Puedo ver su reacción de asombro y con solo una sonrisa me abre pasó levantándose de la mesa tras de mí.
— Suena interesante si no le importa la escoltaré, me dio curiosidad saber más sobre el tema, ¿Claro si no le importa?
— No tengo ningún problema.
Nos acercamos a la mesa de uno de mis conocidos en la industria comercial, al verme sus ojos se abren en grande al verme llegar junto a Sebastián quien es un hombre respetando.
— Señorita Robert, es un gusto poder verla de nuevo, pensé que no tendría la dicha de platicar con usted. — Dice Levantándose en forma de respeto.
— Usted sabe señor Malavé, que yo siempre cumplo mi promesa, disculpe, le quiero presentar a quien será mi nuevo socio, el señor Jhos — Me abro paso para que él pueda saludarlo.
— Es un placer señor Jhos, es un placer conocerte y saber que tan respetada dama es su compañía está noche. — Dice fijando los ojos en mí.
— Para mí es un gusto señor Malavé, he escuchado mucho de usted en la industria comercial, me temo que no hemos podido conciliar para hablar de negocios, la hermosa dama a mi lado me ha dado la oportunidad de cumplir con mi misión. — Dice tomándome de las caderas mientras todos nos miran, yo tomo su mano quitandola de mí, mientras lo miro enojada.
— ¿Pasa algo? — Dice confundido
— Si, me gusta mantener mi espació — Le digo con la sensación que me causo su toqué, una fuerte conexión que siento cuando me toca como ningún hombre me a echo sentir.
— Entiendo, le pido mis más sinceras disculpas.
— Bueno tomen asiento, tenemos mucho de que platicar— Dice Martin señalando los puestos vacíos en la mesa.
La velada pasa sin novedad, al terminar la plática nos despedimos y me voy directamente al coche donde puedo verlo desde lejos acercase a mí.
— Señorita Robert, quería recordarle la cena de mañana, y desearle que pase una linda noche.
— Muchas gracias, no lo olvide, estaré preparada para ese increíble contrato que prepara para mí, que pase feliz noche. — Subo a mi coche sin mirar a tras mi chófer conduce de inmediato de vuelta a casa.
Ya en casa planifico junto con mi grupo la próxima estrategia, puedo ver qué mi tío no está satisfecho con los resultados de esta noche, no puedo simplemente permitir que él me toque de tal manera en público como si fuera mi pareja.
— Espero que no hayas arruinado el plan, recuerda que algunos hombres odian a las mujeres arrogantes, más este hombre que es conocido por ser el más promiscuo de todos
— Creerme sé que vendrá a buscarme no tienes de que preocuparte, lo he dejado tan impresionado que sin duda vendrá a buscarme, no tengo porque véndeme tío, si él realmente desea acercarse lo hará.
— Eso espero, de ti depende que todo salga bien en esta misión.
— No tienes por qué decirlo tío, sabes que yo sé manejar mi trabajo.
— Si, tu trabajo, pero no a los hombres, no has tenido una relación desde hace mucho tiempo y ahora el hombre llega y te pones tensa con tan solo hablar de él, nunca te había visto de tal manera estás muy distraída, despierta— Me golpea en el hombro sacándome de mis pensamientos dónde la imagen de ese hombre recorre mi mente.
— Creo que es todo por hoy tío, gracias, que pases buenas noches.
— Espero que ese hombre no se vuelva un problema para la misión, nunca has estado en cubierto en estas circunstancias.
— Ya tío, deja de preocuparte sabes que no creo en los hombres y eso no cambiará la misión, ni mi enfoqué, no tienes de que preocuparte, descansa — Le digo subiendo a mi habitación donde tomo un baño.
Al salir decido investigar más a fondo sobre Sebastián es un hombre interesante, además que sabe guardar bien sus secretos, ya que lo que se menciona es de sus amantes y nada más, de la vida personal y de su trabajo no aparece nada más que tiene una empresa de aviación con diferentes sucursales, sin mencionar que es un hombre excepcional en los negocios, sin dudarlo sabe lo que hace, calculando cada paso a su vez esto es frustrante, ya que no puedo evitar pensar en lo que realmente oculta ese hombre, como sé que quizás me esté investigando muevo mis influencias cambiando mi información y cada paso que daré debe ser bien pensado este hombre no podrá desviarme de mi objetivo.
*
Sebastián.
Me encuentro en mi casa sin poder sacarla de mi mente, es realmente una mujer deslumbrante, su belleza me cautiva, es una mujer determinada con respeto por sí misma nunca había conocido a alguien igual, su personalidad me dejó asombrado con ganas de saber más de ella, es impresionante que no cayera en mis brazos como lo han hecho muchas mujeres.
— Señor Jhos, ya está aquí el señor Toisón.
— Bien, hágalo pasar.
— Si señor. — Pasan unos minutos y puedo ver a mi investigador llegar al lugar.
— Buenas noches, Sebastián, ¿Me informaron que querías verme?
— Si, así es, siéntate, te daré la información de alguien que quiero que investigues
— ¿Quién es la chica?
— ¿Cómo sabes que es una chica?
— Por su reacción, si realmente no le afectará tanto, no me hubiera llamado a estas horas.
— Bien, su nombre es Elizabeth Robert, quiero saber todo de ella, cada movimiento, cada paso, todo lo quiero saber no pierdas ningún detalle sobre ella.
— Entendido, ¿Algo más?
— Sí, quería saber cómo van las chicas que ingresaron en el país hace un mes.
— Excelente señor, como usted lo ordenó ya están trabajando y tienen un lugar donde hacerse compañía entre todas.
— ¿La rubia de ojos azul ya confirmo su embarazo?
— Si señor, efectivamente la chica está embarazada.
— Bien, entonces ya sabes qué hacer.
— Entendido señor.
— Thomson, envíeme el número de la señorita Robert cuánto antes.
— Entendido.
No sé que tiene esa chica hay algo en ella que hace que no la pueda sacar de mi mente, solo deseó tenerla entre mis brazos y lo voy a lograr, ninguna mujer se me ha resistido antes esta mujer no será la excepción lograré tenerla en mi cama mañana por la noche y lo voy a lograr.