bc

Volver a verte

book_age18+
45
FOLLOW
1K
READ
billionaire
dominant
confident
drama
sweet
bxg
mystery
city
betrayal
lies
like
intro-logo
Blurb

Harry Payne se encuentra en un momento de plenitud: una compañera ideal, el trabajo soñado, la estabilidad ansiada, los amigos que siempre estuvieron. Cuatro años después de su casamiento aparece una mujer con quien tuvo una aventura, con una noticia inesperada que pone en riesgo su matrimonio.

chap-preview
Free preview
Malas noticias
Capítulo 1: Malas noticias. Enero, 2017. Londres, Reino Unido. El móvil de Harry Payne sonaba con una canción en español que tenía tono de llamada. -¡Ralph Wade!   - exclamó con voz cantarina. -¿Como estás? -Bien, bien, ¿y tú? -Quería invitarte a cenar esta noche. Hillary hará su especialidad. -Tu esposa no cocina bien, Ralph - dijo poniendo los ojos en blanco. -¡Te escuché, Harry!- protestó Hillary por detrás, y él rió. -Lo siento, no comeré nada que hayas cocinado. Aún soy joven para morir. -Era una broma, cocinará mi madre y te vas chupar los dedos. -Eso suena mejor. Apuesto a que a Leyla le encantará la idea, ya mismo le aviso y te confirmo con un mensaje. -Dile a tu querida esposa que no sea tan amargada...hace mucho que no nos juntamos.. -Te aviso, bodoque - cortó. El timbre sonó en ese instante. -¡Atiende, amor! - le pidió Leyla desde el dormitorio - Me estoy depilando. -No quería saber tantos detalles - murmuró para sí mismo. Cuando abrió la puerta, Harry no podía creer lo que sus ojos veían; Ginny Wade, la hermana de Ralph, muy cambiada, lo miraba con una expresión de penosa disculpa. Su cabello pelirrojo lo llevaba muy largo, casi hasta la cintura, y una vincha color blanca. Vestida con ropa hippie, y  con una enorme campera abrigada y borcegos. Hacía cuatro años que no la veía, y además no era bienvenida en su hogar: su visita era inoportuna, ella misma lo sabía. -Creí que vivías en San Andrés...-solo pudo decir, impresionado. -Regresé ayer. - contestó ella con voz ronca.- Después de cuatro años. -No deberías estar aquí, tú sabes bien porque - dijo Harry, con todo lo cordial que fue capaz. -Lo siento, se que es algo desubicado, porque Leyla se enteró que tú y yo... -Shhh... es mejor que te vayas, no quiero ser maleducado, pero me estás comprometiendo - soltó ya crispado. -Lamento venir sin avisar. -Me estás comprometiendo, Ginny. Sí Leyla nos ve juntos aquí, va a pensar cualquier cosa, sabes que te odia...-remarcó, incómodo.- -Es importante, escúchame dos minutos, y luego me iré.-suplicó- ¡Por favor! - juntó sus manos. -Está bien, pero no aquí. No quiero que Leyla nos escuche. Cuatro años antes, San Andrés, Colombia, agosto de 2011 Su despedida de soltero estaba siendo inolvidable. Tres días con sus amigos en una isla paradisíaca, en la cual podían disfrutar, beber, y salir a bares, probar comidas típicas. Harry estaba feliz, se casaría pronto con el amor de su vida, Leyla Abbott con quien un año atrás inició una relación que se dio de un modo natural. Coincidieron en una discoteca y congeniaron rapidísimo. Su novia y sus amigas, habían optado por hacer la despedida de soltera en Brasil, y ellos en Colombia, en la paradisíaca Isla de San Andrés. Leyla confiaba ciegamente en él, jamás le había hecho una escena de celos, era una mujer muy sensata, y madura. Harry adoraba ese detalle de ella, se sentía tranquilo. La última noche, decidieron ir de copas a un bar en la playa. Todos estaban muy morenos porque ya llevaban tres días en el paradisíaco lugar, y querían festejar y disfrutar a lo grande. Sin embargo, debían ser precavidos con el alcohol porque el vuelo de regreso salía al mediodía del día siguiente. -¡Esta es la última noche! - dijo uno de sus amigos llamado Sean, alegremente. -¡Se nos acabó la fiesta! - se quejó Ralph - Hillary debe estar como loca. -Me consta, amigo, no ha dejado de llamarte. -¡Vamos, ella confía en mi! - exclamó, incómodo.- Además, está en la despedida de Leyla...-miró alrededor - ¿Será que encontraremos a Luna y a mi hermana? -¿Ya llegaron? - preguntó Sean -Creo que ayer. -Parece que estamos todos...el mundo es un pañuelo, no lo puedo creer. Lleno de chusmas por todos lados...Luna y Virginia no son excepción. - comentaba Sean, sorprendido. -¡Hey, estás hablando de mi hermana! - explotó Ralph, rojo - Y no le gusta que le digan Virginia, la llaman Ginny. -Para mi las envió Hillary para controlarte, Ralph - se burló Harry. -¡O quizá para controlarte a ti!- aventuró Sean, y lo empujó. -Dejen de decir estupideces -terció Ralph, hosco- Ginny y Luna organizaron el viaje antes que nosotros, coincidieron sus vacaciones... fue pura casualidad. -Las mujeres siempre van un paso adelante - aportó Harry, sin darle importancia - Como sea, amigo, es mejor que no la saludemos ahora...¡es un encuentro entre hombres! -Habla por ti, Payne - saltó Sean - Me gustaría conocer a las amigas colombianas de Ginny, las que conoció por chat. -Estás alzado, Finn- declaró Harry con sorna. -Estoy soltero, no seas envidioso. -¿Otra ronda de daikiri? - propuso él, descontracturado. -Yo estoy demasiado borracho...-dijo Ralph riendo.- En hotel me clavé tres... -Eres un flojo - Harry palmeó su espalda, socarronamente- -No quiero terminar vomitando. -Es mejor que te controles, no pienso llevarte al hotel - intervino Sean contrariado.- ¡Oh, yo sabía, mira quienes vienen! Ginny Wade, con un pareo atado a la cintura, y un rodete en el cabello, estaba con su amiga Luna, y otras dos preciosas chicas, riendo y bebiendo. -¡No puedo creerlo, vino en bikini! - se quejó Ralph. -¡Estamos en la playa, Ralph! - dijo Harry poniendo los ojos en blanco. -¡Qué hermosas la colombianas! ¿Hablarán inglés? - dijo Seamus. -Claro que sí - aseguró Harry.- -Vamos a saludarlas... Los tres amigos se acercaron a ellas decididamente. La noche estrellada era perfecta, corría una brisa y escuchaba música movida y de fondo las olas del mar. -¡Luna, tanto tiempo!- Harry la abrazó. -Divirtiéndote en Colombia, ¿eh? ¡Se te acabó la libertad, Payne! -Eso no es un ningún sacrificio...-dijo arrogante. -Ay, estás enamorado - pellizcó su cachete, Harry la apartó. -¡Hermanito, sabía que te encontraría! -Ginny lo abrazó y luego a Seam. Al ver a Harry sonrió.- ¡El futuro marido de Leyla Abbott! ¿Como la están pasando? -Excelente, ¿y ustedes? - miró a las otras dos. -Luna y yo queremos presentarles a Julia y Brunela...¡nuestras amigas del chat! - Seam se acercó a Brunela, que era rubia y sus ojos resaltaban por el bronceado. Julia, en cambio parecía muy tímida. Ralph no daba señales de interés, solo miraba su celular, hablando con su esposa Hillary. La muchacha se acercó a el. -Hola...eres el hermano de Ginny, ¿no? -preguntó con cautela. -Así es - dijo incómodo.- -Me ha hablado mucho de ti. -Espero que bien -Ella asintió y bebió un poco, sonriendo. Raplh miró el vaso que sostenía y se percató que llevaba una alianza.- ¿Eres casada? -Si, - confirmó Julia orgullosa- Mi marido vendrá en cualquier momento...es jugador de fútbol. -Me encanta el fútbol..¿cómo se llama? ¿juega en reserva?- se interesó. -Ramiro Reviglio -  Ralph abrió los ojos como platos. -¿¡El arquero de la selección colombiana!? - dijo impresionado. -Ah, sí - dijo roja - Es él. -¿Puedes presentármelo? ¡Quiero su autógrafo, soy admirador suyo! - juntó sus manos como un niño. -¡Claro! Está en la otra punta...le encanta firmar autógrafos. Los dos se fueron a buscarlo hablando animadamente sobre fútbol. Sean ya estaba besándose desaforadamente con Brunela, y apenas habían cruzado dos palabras. Luna, la amiga de Ginny, coqueteaba con el cantinero, detrás de la barra. Harry miró a Ginny decepcionado. -No puedo creer que me dejen solo en mi propia despedida.-protestó indignado. -¡Ey! - lo empujó riendo ¡Yo que soy, una estatua! -¡Lo sé! Pero se supone que íbamos a estar todos juntos - dijo ofendido. -No exageres, déjalos disfrutar. ¿Tomamos algo? -No debería, estoy borracho. -Esto te gustará, Harry, sígueme.-el la siguió mirando el tatuaje de su espalda. Era un caballito de mar en su omóplato- ¡Cantinero! Quiero dos "s*x and the beach" -¡Ya te lo preparo, Ginny! -¿Te conoce? - se sorprendió Harry. -Amigo del novio de Luna...-la rubia ya había desaparecido- Veo que se fueron a su casa...tiene un fetiche con los barman. - rió despreocupada. -Eso parece... El cantinero trajo dos vasos de un líquido anaranjado, y Ginny le entregó uno.  -¡Brindemos por tu casamiento! Fueron un trago, dos tres, hasta que los dos estaban muy alcoholizados. El bar se fue vaciando poco a poco, eran las cinco de la mañana. Sean y Ralph no habían vuelto. Harry miró a Ginny, tambaleándose. -Creo que debería irme al hotel, estoy puesto. - dijo tomándose la cabeza. -Sí, yo también...pero sí me acuesto vomitaré...-se lamentó Ginny, muy mareada. -Puede que me pase lo mismo. Una ducha ayudará, ¿no? -Existe algo mejor que una ducha -replicó la joven, sonriendo.. -¿Qué? -¡Tirarse al mar de noche!- dijo entusiasmada. -Estás loca, ¡no tenemos el traje de baño! -Solo tú vienes a una fiesta en la playa sin traje de baño...-carcajeó burlona - Bueno, tírate con la ropa, no seas quisquilloso. Tomó su mano y corrieron a la playa... Harry la siguió. Ginny empezó a sacarle fotos mientras corría, en las cuales salía con todo tipo de gestos borrachos. Luego encendió la cámara... -Esto será divertido... -¡No me filmes, no seas cruel!-dijo Harry, tentado. -Estamos aquí en la playa con Harry Payne, el exitoso policía, quien disfruta de una despedida de soltero...¡pronto se nos casa! -decía histriónica- ¡Una gran oportunidad para festejar y tomar y tomar! - Harry reía. -Esta pelirroja es una esponja y me ha llevado por el mal camino - aseguró haciendo una morisqueta. -¡Mentira! Harry ya estaba borracho... ¡es un tonel!- él la empujó.-Nos dejaron solos...Brunela, Sean, Julia, Ralph y Luna...-enumeró graciosamente.- Gracias, son muy amables. -Si, una amistad de fierro - dijo sardónico, y rieron. -¡Vamos al mar! Ginny se quitó el pareo y dejó el celular con su cartera hippie encima de él. Harry se quitó la remera y corrió hacia ella. Empezaron a tirarse agua, riendo. Ginny miró el cielo estrellado. -¡Excelente noche, Payne! ¡Está tibia el agua! Amo este lugar...es maravilloso. -La verdad que sí, es increíble - dijo agitado, y pasó las manos por su cara. El bóxer se pegaba a él, dejando demasiada información. Ginny apartó la vista, y se estiró, disfrutando el aire fresco en rostro. -Me siento menos borracha que antes - lo miró - ¿Y tu? -Más o menos...-miró su esbelto cuerpo dentro de ese bikini amarillo- Estás muy bronceada. -Sí - dijo, con frescura- ¡Por fin lo logré! -corrió la tirita del corpiño para mostrarle la diferencia.- ¿Ves? Me encanta como me queda el color. -Sí, te queda bien - se acercó un poco. -Deberíamos volver, ¿no? - de repente, se sentía incómoda.  -Espero que tu hermano se esté portando bien...-deslizó Harry, riendo. -Claro que si, solo fueron a ver al marido de Julia, Ramiro Reviglio. -¿El arquero? - se impresionó. -Si, el millonario arquero...-dijo como si el tema la aburriera. -Ralph va a volverlo loco, es fanático. - dijo Harry, y la miró sonriendo por la comisura de los labios- Estás bien relacionada,Wade...-se acercó un poco más. -Me parece a mí, ¿o me estás mirando con dobles intenciones? - apuntó ella, riendo. -Nada que ver - mintió Harry. -No te creo nada... -Haces bien -admitió en un impulso. -Te vas a casar, Harry...-él la tomó de la cintura. -Lo que pasa en San Andrés, queda en San Andrés, ¿no?-dijo elocuente. Ginny sonrió, pensando que Harry era una deuda pendiente. Siempre lo había mirado pero nunca pasó nada entre ellos. Era el mejor amigo de su hermano y no quería mezclar. Y en cuanto a su pareja...la crisis crecía entre ellos y dudaba que tuviera arreglo. Sin meditarlo, pasó unas manos por su cuello y lo besó con ganas. Harry enseguida le hizo upa a horcajadas, el agua le llegaba a la cintura.- Oh...estoy re caliente. -Pero estamos en la playa...-susurró, en sus labios. -No hay nadie, Ginny, es ahora o nunca... Empezaron friccionarse, gimiendo y gritando. Harry fue saliendo del agua, y la recostó en la arena. Le bajó él corpiño empezando a lamer sus pezones. Sintió el gusto a sal en su boca. Ginny gimió desesperada. Harry se bajó los bóxers, hasta las rodillas, y le corrió las bragas para penetrarla en una embestida. Ginny gimió y aprisionó con sus piernas la cintura del muchacho, acomodándose. Gimieron los dos. Las mentes de ambos estaban abstraídas por efecto del alcohol y la fiesta que se oía muy de lejos... -Me encanta...¿me sientes? - empezó a moverse, dentro de ella. Los dos jadeaban, respirando entre cortado. Harry levantó una pierna y la embistió bruscamente, y varias veces.- ¿Así llegas? Oh... -Si,sí, estoy a punto... -Yo también...-volvió a moverse mientras manoseaba la parte íntima de la joven, tocando su punto más sensible. Ginny gritó de placer, y Harry se derramó en su cuerpo. Desprendió el contacto y se acostó a su lado. Se quedaron tirados en la playa, mirando las estrellas. Luego rieron a carcajadas. -Fue una locura -declaró Ginny, cayendo a la realidad de lo que había hecho. -No exageres, solo la pasamos bien...-se acercó y comenzó a besarle el cachete.. -¿Quieres follar de nuevo? - lo miró sorprendida de su descaro. -Me encantó...eres riquísima nena. -Fuimos infieles... -Esto muere acá. -le dijo Harry - Ni Dean ni Leyla tienen forma de enterarse... -Eso es cierto -se puso a horcajadas de él y se entregaron al placer. Cuarenta minutos más tarde, empezaba a amanecer. Ginny se despidió de el y corrió hacia su hotel. Harry hizo lo mismo. Había sido la mejor despedida de soltero de su vida. No había forma de que lo supieran...  Presente, Enero 2017, Londres Harry y Ginny se subieron al auto de esta última, era un modelo viejo. Hacía mucho frío, era una noche helada, por lo que la pelirroja encendió la calefacción y frenó cerca de un restorán con un cartel parpadeante. Harry estaba nervioso, no entendía porqué lo estaba buscando, ni que podía ser tan urgente. La sola presencia de la joven hacía que el remordimiento lo envolviera; era la única mujer con la que había engañado a Leyla, y prefería que estuviera lo más lejos posible, porque su matrimonio estaría en peligro. Solo pensar que su esposa lo viera con Virginia Wade... Hasta se alegró cuando decidió quedarse un largo tiempo en San Andrés, trabajando allí junto a Luna y sus amigas, Brunela y Julia.. ¿Por qué había vuelto? ¿Qué quería de el? Intentó mantener la cordialidad, era la hermana de su amigo. -Habla, por favor, no tengo mucho tiempo - la apuró con ansiedad- Leyla notará mi ausencia. -Por favor, no me presiones - exclamó, incómoda - -¿Tan grave es? ¿Le pasó algo tu familia? - dijo asustado, pero Ginny negó. -Ellos están bien...se trata de mí.- Harry respiró hondo. Esperaba que Ginny no les hubiera contado su desliz, estaría en serios problemas, sobre todo con Ralph; además, era una historia pasada, no tenía ningún sentido. Luego de su boda, Leyla se había enterado por terceros, nunca supo quién se lo dijo, su esposa no accedió a contarle su informante. Afortunadamente, no lo sabía nadie más. Su esposa lo había perdonado porque Harry hizo los méritos suficientes para ello. El hecho de que Virginia se hubiera quedado a vivir en Colombia, aplacó la persecución de Leyla con respecto a ella.- Se que no nos vimos en todo este tiempo, pero.. -Mira, yo no... se que estuvimos juntos, pero fue hace años, y mi mujer se enteró... estoy enamorado de Leyla. -¿Crees que vine a hacerte una declaración de amor? - dijo molesta por su arrogancia. -Bueno... -Olvídalo, no vine a pedirte que la dejes, nada más lejos. -aseveró, cortante- Poco me importa lo que hagas con ella. -Entonces dime que carajo pasa -dijo ya exasperado- Ya me estás poniendo nervioso... -¿Nunca te preguntaste porqué me quedé en San Andrés? Claro que Harry se lo había preguntado en su momento, pero fueron dudas que decidió dejar atrás. No era de su incumbencia lo que Ginny hiciera con su vida, ya había pasado demasiado tiempo torturándose con buscando respuestas, hasta que a duras penas logró erradicar de sus pensamientos todo lo que tuviera que ver con la infidelidad. No porque ella le importara sino por la culpa de haber traicionado a Leyla y a su mejor amigo, aún latían en su ser. Fue la única manera que encontró de seguir adelante: no pensar en el asunto. -Lo único que se es que cortaste con Dean por teléfono...-terminó contestando- y decidiste quedarte allá un tiempo, porque habías conseguido un empleo. - la miró - Eso me dijo tu hermano. -Ese no fue el único motivo - Harry analizó su expresión intentando entender que quería decirle, pero Ginny no podía mirarlo a los ojos. ¿Acaso tenía problemas con la ley? -¿Qué pasa? ¿Eres narcotraficante? -especuló, ya sin saber qué pensar. Ginny largó una carcajada- ¡Deja de reírte y habla! -Está bien, está bien - se puso seria- Antes que nada quiero que sepas que esto no es para presionarte...-él rodó los ojos, y Ginny respiró hondo- Después de nuestro encuentro en la playa yo...quedé embarazada. Harry sintió que el mundo se detenía, que sus oídos no escuchaban, y retuvo todo el aire que tenía en los pulmones. Seguramente no había escuchado bien. -No entiendo. -¿Que es lo que no entiendes? -¡Explícame que mierda estás diciendo! -gritó sacado. -Lo que oíste: quedé embarazada de un hijo tuyo.- repitió con calma. -¡Qué carajo estás diciendo! - Harry sintió que iba a descomponerse. -Es la verdad, lo siento. -Es una broma, ¿no? -masculló, transpirado. Ginny suspiró, sintiéndose fatal de verlo así. -Es una niña...se llama Kyara, y tiene un cuatro años. Volví para tener a mi hija en Londres, pero nadie supo eso. Nació aquí, y luego regresé a Colombia. Me acompañaron mis amigas durante todo el embarazo. -dijo mirando hacia abajo, angustiada. -No puede ser... -Si, es así. -Dime que bromeas. -Lo siento. -¿Lo sientes? - se escandalizó- Tengo una hija de cuatro años y acabo de enterarme... -Si - confirmó, en voz baja - Mira, no iba a decírtelo, porque me consta que amas a Leyla...no quería arruinar tu felicidad, pero... -Lo estás haciendo - la increpó. Ginny lo miró ofendida. -¡No te estoy pidiendo nada! - le gritó, fastidiada- ¡Solo que pensé que deberías saberlo! -¿Por qué no me avisaste antes? - reclamó, desconcertado. -¡Porque estaba asustada! ¿Crees que a mi me hizo feliz la noticia? - respondió, sintiéndose incomprendida- ¡Quise morirme! ¡Fue inoportuno, ni siquiera había superado la historia con Dean! -Mierda...-se tapó la cara con las manos, tenía la boca seca por el shock- Esto es una pesadilla... una niña de cuatro años.. - la miró con rechazo mal disimulado - Eres una loca de mierda... -¡No te pases, Harry! - saltó Ginny apretando los dientes. -¡Ni siquiera me avisaste que no te cuidabas!- la inculpó gritando. -¿Crees que pensé en eso? ¡Fue una calentura, estábamos borrachos en la playa! Deja de hacerme responsable a mí, ambos cometimos una imprudencia! - recriminó, dolida. -Qué mierda voy a hacer...- se quejaba, respirando entrecortado- Esto... es... me arruina la vida. -Mira, no tienes que hacer nada - repuso ella con tranquilidad- Kyara lleva mi apellido.-Harry la miró, aún no podía digerirlo, no sabía como reaccionar- Yo vengo a pedirte nada, sino a enmendar mi error de no contarte antes... -¿Tus padres lo saben? -Ya te dije que nadie lo sabe - se exasperó- ..solo Luna, mis amigas de Colombia, y ahora tú.-Harry no dijo nada, sentía que le habían pegado un palazo en la cabeza- Quiero dejarte en claro que no te pediré nada, ni siquiera dinero...-susurró, con mucha dificultad. También estaba nerviosa- Tengo lo suficiente para mantenerla... Si bien no fue buscado yo... con el tiempo me acostumbre a la idea, y es mi hija, yo la amo...creo que tienes derecho a saberlo, lamento no haberte dicho, me enteré que estaba embarazada el día de tu casamiento, como imaginarás, no era oportuno...y después no me animé a volver... los años pasaron, y... -No quiero seguir escuchándote, Virginia. -¡Deja de hablarme así, imbécil! ¡Baja dos tonos conmigo! - gritó furiosa. -¡Estás loca! ¡No sé que pensar de ti!- ella alzó las cejas. -Me importa poco lo que pienses, solo vine a contártelo, me armé de valor - reprochó, muy dolida por su reacción- No sabes cuánto me costó tomar esta decisión... -Mira, pasaron muchos años y esta historia no me cierra por ningún lado. -¿A qué te refieres? -No quiero ser brusco, no quiero ofenderte. -se atajó visiblemente enojado- Pero necesito asegurarme que realmente es mi hija... -¿Quieres hacer un examen de ADN? - inquirió, muy tranquila. -Lo siento, pero ... yo hace años que no te veo. -Puedes hacerlo, yo lo comprendo - concedió ella parpadeando- Pasaron años, y casi ni nos conocemos, nosotros... nos acostamos una vez... entiendo tu situación. De todos modos, la niña es igual a ti...- él se estremeció. -Mierda...no digas eso. -No tienes que hacerte cargo, pero pensé que ya era hora que lo supieras porque... -Necesito estar solo. - la interrumpió, y se bajó del auto.

editor-pick
Dreame-Editor's pick

bc

La Mirada de Jade

read
89.5K
bc

SIEMPRE SERÁS MI VAQUERO FAVORITO

read
161.7K
bc

Algo más que una venganza

read
398.1K
bc

Bella Cadena de Amor

read
126.7K
bc

ROMANOV

read
670.7K
bc

(+18) Sweet Candy - SEX HARD 1

read
191.7K
bc

La Novia Sustituta del Millonario

read
361.6K

Scan code to download app

download_iosApp Store
google icon
Google Play
Facebook