Sinopsis
Kleo pestaño con fuerzas tratando de alejar las lágrimas que amenazaban con desbordarse de sus ojos. Sin embargo, ver como su esposo la ignoraba y le daba toda su atención a Brittany, su primer amor, solo le recordaba que todos los intentos que había hecho para que su esposo se enamorara de ella habían sido una perdida de tiempo.
Ambas estaban en el mismo lugar, a ambas casi la atropellaban. Brittany no había salido herida, en cambio ella podía sentir como la pierna se le iba entumeciendo por el creciente dolor del golpe que se había hecho al caer.
Sabía que tenía más golpes. Pero todos ellos no le hacían competencia a su corazón roto.
Solo podía escuchar los murmullos a su alrededor, el sonido de la ambulancia y los quejidos falsos de esa mujer que se aferraba a su esposo con descaro mientras ella luchaba por no ceder al dolor.
Este accidente solo le confirmó lo que tanto se había negado a ver, por estar ciegamente enamorada.
Su esposo no le importaba lo que sucediera con ella, bien se podría morir y en lugar de hacerlo sufrir le estaría haciendo un favor así podría volver a estar con su amada Brittany.
—Señora, ¿Se encuentra bien?
Kleo aparto su atención del espectáculo que estaba dando su esposo y miró al secretario de este. No sé había dado cuenta cuando este se había acercando a ella.
—Estoy bien.—la voz le salió sin ánimo, lo cual le hizo sentir una punzada en el pecho. Había enfrentado muchos desplantes, pero nunca le habían afectado tanto como este.
—El señor Kim se encargará de las investigaciones. No sabemos si el accidente fue por casualidad o premeditado.—informó el secretario con cuidado, observando lo mal que estaba la esposa de su jefe.
—El señor Kim piensa que fui yo que lo cause…no tienes que poner excusas por el. Seguro piensa que intente lastimar a su querida amiga.—Kleo evitó el mote con el que todos conocían a Brittany y se recriminó no haberla evitado a tiempo.
Kleo frunció el ceño, recordando la mirada que su esposo le había dado cuando vino a ver lo que había sucedido.
Ella como una tonta, lo había llamado para que viniera a socorrerla pero solo le había dicho con su voz fría e indiferente, que estaba ocupado, que dejara de molestar. Sin embargo, su presencia en la escena del accidente fue inmediata cuando Brittany lo llamo llorando de forma exagerada y chillona.
—No creo que el señor Kim piense eso señora.—consolo el secretario consciente de que la esposa de su jefe podría tener cierto nivel de verdad.— ¿Señora?
Kleo sintió cuando el último hilo de resistencia salió de su cuerpo. Un pequeño quejido salió de sus labios y luego lo único que vio fue oscuridad. Perdiéndose de la escena que se desarrollo una vez su esposo se dio cuenta de que está yacía desmayada en los brazos de su secretario.