LUCIFER

NOTA

LUCIFER

Hola querida lectora, quería decirte que estoy de regreso ¿Me extrañaste? Sé que sí. Por qué ¿Quién no me extrañaría? Antes de comenzar a retomar mi historia, quería decirte unas palabras…

Sé que esperan encontrar al típico "héroe", ¿verdad? Ese príncipe azul, perfecto, siempre dispuesto a salvar a la damisela. Bueno, si eso es lo que buscas, te has equivocado de historia… y de hombre.

Yo no soy ese tipo. De hecho, soy todo lo contrario. Me llaman Lucifer, y sí, soy el rey del infierno. Pero no te confundas, no es solo un apodo, es mi realidad. Mírame bien: soy arrogante, narcisista y mujeriego. ¿Por qué? Porque puedo. Y lo disfruto. El amor, la compasión, el sacrificio... son para los débiles.

Si hay algo que deberías saber de mí, es que no soy el "chico bueno". No tengo un corazón noble ni intenciones puras. Mi vida se reduce a tres cosas: venganza, placer y poder. Fui un ángel, es cierto, pero esos días de inocencia están muy lejos. Ahora soy el rey del infierno, el mejor asesino a sueldo que puedas encontrar. Las emociones que otros buscan —el amor, la compasión— para mí son una pérdida de tiempo.

No estoy aquí para redimirme ni para que me salves y mucho menos para enamorarme. Si crees que puedes cambiarme o que hay una pizca de bondad dentro de mí, te reto a intentarlo. Pero te advierto, no vas a encontrar a un príncipe azul bajo esta piel de ángel caído.

Mi único objetivo es matar al hombre que me arrebató todo lo que alguna vez valoré. No me importa cuántos cuerpos queden en el camino ni cuántas veces mi moral se tuerza. Soy el villano de esta historia, y créeme, hago muy bien mi trabajo.

¿Quieres alguien que te proteja y te susurre dulces palabras? Eso no soy yo. Yo soy quien hace arder el mundo si es necesario para obtener lo que quiero. Y si crees que hay un "final feliz" esperándote, prepárate para algo mucho más oscuro.

Alessia, la hija de mi jefe, es lo único que se interpone entre mi camino y la completa destrucción.

Ella realmente es un fastidio.

Ve algo en mí que ni yo mismo puedo reconocer. Pero, ¿puede realmente un ángel salvar a un demonio? Te invito a descubrirlo, pero no esperes redención ni finales felices. Solo destrucción. Así que vuelvo y te repito, si estás esperando redención o finales felices, mejor cierra el libro ahora. No encontrarás nada de eso aquí. Aquí solo verás destrucción y fuego. Y yo, en el centro de todo, disfrutando cada segundo.

Si te atreves a leer mi historia, no te sorprendas cuando descubras que soy el villano. Y lo disfruto. Soy quien mueve las piezas, quien hace que todo arda.

Si sigues aun después de todo lo que te he dicho, no me queda más que decirte que:

Bienvenida a mi infierno.

Lucifer.