Capitulo 5

2487 Words
Amenazas y encuentros fortuitos Ashley Estuve a punto de corresponder el beso, pero un portazo me lo impide (gracias a la diosa luna), me volteo a ver de quien se trata, no me sorprende encontrarme con la mirada furibunda da la novia de Connor con lágrimas corriendo por sus mejillas, lo que me hizo rodar los ojos. - ¡¿QUE SIGNIFICA ESTO?!-. Grita histérica. -Significa que estoy teniendo un momento con mi luna-. Dice el de lo más tranquilo. -Y estas interrumpiendo-. Gruñe lo que me hace estremecer. - ¡ELLA NO ES TU LUNA, SOY YO, ¡TU ME MARCASTE! ¿LO OLVIDAS? -. Grita ella impotente. -Yo mejor me voy, ustedes arreglen sus asuntos maritales. - Digo apartando a Connor el cual gruñe por mi acto, pero no protesta y sin decir más salgo de la habitación, pero no sin darle una sonrisa triunfante a la loba que se encuentra parada junto a la puerta más que furiosa. Tuve que salir de la casa por los gritos de Connor y la tipa la cual se ahora, llama Carol según lo que me dijo Azucena, parece que la ya nombrada se ha acostado con media manada y como el padre de ella es amigo del papá de Connor lo obligaron a casarse con ella, lo cual el no quiso. Aunque para acostarse con ella no tiene problema alguno. ***** Estoy en el bosque, caminado tranquilamente hasta que un sonido me hace parar en seco y ponerme en posición de ataque, el ruido es como si alguien pisara algunas ramas, agudizo mi olfato y el olor que me llega no es uno muy bueno que digamos me huele a muerte. Vampiros Pero eso no es todo también me huele a hiervas y pino y no creo que sea el bosque, es una fragancia cautivante y bastante atrayente. - ¿Quién está ahí? -. Se que es una pregunta estúpida, no me va a responder algo tipo "soy tu asesino, por aquí hay una ardilla ven a verla está bonita" pero fue lo primero que se me vino a la cabeza. -Vaya ¿qué tenemos aquí? una lobita- Dice una voz masculina la cual no reconozco, pero siento el olor cada vez más cerca. - ¿Algún problema chupa sangre? -Le digo segura y retándolo, pero lo que escucho es una risa de parte de él. -La lobita tiene carácter, me gusta serás una buena reina-. Paren todo, retrocedan y ALTO, ¿dijo reina? - ¿Como que reina? ¿quién eres? -. Le digo ya cansada de esta situación y bastante confundida. - Soy Dereck Soneras mi reina, mi alma o como dirían los lobos mi mate. - No respondí ¿cómo es eso de que tengo dos mates? no, no, eso no es posible, no puedo tener dos mat...Claro eso es lo que Savannah me dijo, pero ¿por qué? CONNOR Al sentir que la presencia de Ashley no está en la casa reconsidere la situación, Carol entró a mi habitación, me interrumpió cuando por fin pude probar los labios que por tanto tiempo espere probar, desde un principio le he dejado muy en claro que no la amo y nunca lo voy a hacer. - ¿CUAL ES TU MALDITO PROBLEMA? -. Le grito ya enfurecido haciendo que retroceda por el volumen de mi voz. - ¡TU ERES MI MALDITO PROBLEMA, TU ME MARCASTE, TU ME DIJISTE QUE IBA A SER TU LUNA! -Dice ella con lágrimas en sus mejillas. - ¡ES LO QUE LES HE DICHO A TODAS! ¿¡NO ENTIENDES!? ¡ANTES DE TI HABÍAN MUCHAS MÁS A LAS CUALES LES HICE LAS MISMAS PROMESAS PERO ENTIENDE UNA COSA!-.Me acerco a ella más calmado.-Nunca te quise entiéndelo solo te utilicé, nada más, la única que verdaderamente me importa es Ashley, ahora vete. -Ya vera que muy pronto vas a volver, siempre vuelven, esa niña no te puede complacer, está cerca la temporada de celo ¿tú crees que ella te va a satisfacer?, recuerda mis palabras me vengaré con lo más preciado que tienes-. Dice ella saliendo del cuarto dando un portazo. Salgo a buscar a Ashley, pero no logro sentirla ni a Savannah, esto está haciendo que me desespere ¡Demonios! no pensé que me llegaría a sentir tan perdido sin su sola presencia, jamás pase por algo igual y es estresante no saber su paradero. Estoy corriendo como loco por todo el bosque olfateando el poco aroma que he logrado detectar, pero este es opacado parcialmente por uno que no me gusta nada, la hablando con el chupa sangre de Dereck uno de mis más grandes enemigos, nuestra rivalidad es desde hace más de cincuenta años, agudizo mi oído para escuchar lo que dicen. - ¿Como que reina? ¿quién eres? -. Pregunta mi vida, pero qué ¿reina?, sigo escuchando, pero la respuesta que dice el idiota me deja anonadado. -Soy Dereck Snow, eres mi reina, mi alma o como dirían los lobos mi mate-.Ella no responde, pero yo sí, me hierve la sangre, ella no le pertenece a él, ella es mía de nadie más, me posicioné en frente de ella y le gruño al chupa sangre que me mira con una burlona sonrisa. -Vaya, vaya el lobo alfa ¿cómo has estado? -. Pregunta el muy cínico, lo que hace que gruña aún más fuerte, me transformo en mi forma humana quedando como vine al mundo, pero me importa muy poco. -Ella no es tu reina ella no es nada tuyo-. Le digo furioso por lo que él se ríe en mi cara. -Claro que lo es, es MI reina-. Dice el imbécil remarcando el mí. -Ella no es tuya es mía-. Le gruño al idiota. - ¿Pueden dejar de hablar de mi como si fuese un objeto? -. Dice la voz de mi luna lo que hace que voltee a verla, tiene el ceño fruncido lo que la hace ver más hermosa de lo que ya es, aun cuando evita mirarme. -Que yo sepa soy una persona no un juguete por el cual dos bebes se pelean. -Perdón. - Decimos Dereck y yo al unisonó lo que me hace voltear a verlo y fulminarlo con la mirada. -Me quiero ir a la casa Connor. Me dice mi luna con cara de fastidio. -Todo lo que paso hoy lo resolvemos mañana-. Ella se va caminado sin mirar atrás. -Que te quede claro chupa sangre ella es mía ¿entendido? -¡CONNOR! Logro alcanzar a Ashley, pero en cuanto le voy a hablar ella me fulmina con la mirada haciendo que me trague mis palabras. Llegamos a la casa y ella saluda muy amigable a Azucena, entra a la cocina y la sigo, pero sin que ella me vea ya vestido - ¿Porque me sigues? -. Me pregunta aún de espalda mientras la veo preparando un sándwich de jamón. -Porque quiero y puedo-. Le respondo obvio. -Se que quieres algo, dime-. Se voltea a verme mientras come. - ¿Tengo que querer algo? -. Le pregunto para fastidiarla lo cual logro casi de inmediato pues ella rueda los ojos. -No estoy de humor Connor-. Dice ella tratando de calmarse. - ¿Que va a pasar con el chupa sangre? -. Le pregunto con asco al mencionar a Dereck. -No lo sé, tengo que pensar-. Dice ella pasando a mi lado, pero la detengo abrazando su cintura por lo que ella se tensa. - ¿porque te tensas? -No estoy acostumbrada a que otro hombre me toque-. Dice ella de lo más tranquila, y yo, yo estoy hirviendo en ira al escuchar sus palabras. - ¿Como que otro hombre? -. Gruño lo que a ella le da risa y con tan solo escucharla reír me tranquilizo. -Calma perro, hablo de mis hermanos-. Dice ella aguantando las ganas de reírse de lo celoso que me puse. -Vale, pero hay otro tema del cual tenemos que hablar-. Le digo poniéndome serio, ella se gira y quedamos frente a frente, pero yo tengo que bajar la cabeza, ya que tengo como dos cabezas más que ella. - ¿De qué? -. Pregunta ella extrañada. -La ceremonia para nombrarte mi luna-. Le digo por lo que ella corre la mirada, ella se suelta de mi agarre y frunce el ceño. -Voy a llamar a mis hermanos-. Dice ella y se va a la habitación sin darme tiempo de preguntarle ¿porque se puso así tan de repente? ASHLEY Una semana encerrada no es bueno para nadie. Me siento en cautiverio y me enoja que aun la mujer de Connor se pasee por aquí como si fuera su casa ¿si quiera sabe lo que es el amor propio? Aunque no creo que a el le moleste, en la noche siento como se forman hematomas en mi cuerpo, el dolor agonizante que crea el vinculo al ser traicionado, me estresa no poder deshacerme de el sin sufrir en el intento, pero en este momento prefiero reducir mi lapso de vida al rechazarlo como mate a seguir en este agonizante dolor. Me molesta que siga insistiendo en hacerme su luna, es algo que para mi no tiene cabeza ni pies, yo no voy a ser segunda opción de nadie, yo no me dejo pisotear por nadie… Necesito pensar seriamente los pasos que daré y eso implica alejarme de la mansión y de Connor. No puedo creer que de verdad piensa nombrarme su luna luego de marcar a otra, le prometió cielo y tierra y no puedo con eso, aunque le haya dicho puras mentiras para acostarse con ella, confió en él, siento que en algún momento me puede hacer lo mismo. Voy a llamar a Thomas, no he hablado con él ni con Louis desde que llegue y de verdad que me hacen mucha falta, ellos son lo único que tengo. - ¿Hola? -Hola Thomas habla Ashley. -Pequeña ¿cómo estás? ¿cómo te están tratando? -Bien, pero necesito que vengas, quiero pasar unos días allá con ustedes. - ¿Connor sabe? -No y no quiero que se entere, por favor solo van a ser unos días dos días máximo. -Está bien voy para allá. Subo corriendo a mi habitación y empaco en una pequeña mochila algo de ropa ya que toda me la traje. Después de terminar de empacar abro la ventana de la habitación y salto, sé que es un segundo piso, pero igual no me voy hacer daño, corro velozmente a las fronteras de la manada y ahí está mi hermano, recostado sobre su BMW X5 3.0 y corro hacia el, cuando se percata de mi presencia sonríe de oreja a oreja. -¡¡PEQUEÑA!!- Grita eufórico mi hermano y me abraza o mejor dicho asfixia, pero igual le devuelvo el abrazo. -¡¡IDIOTA!!-. Grito yo con lágrimas en los ojos. -No llores pequeña-. Me dice el con sus ojos cristalinos igual que los míos. -Te extrañe mucho-. Le digo y el me vuelve a abrazar con desesperación. -Yo también pequeña, no sabes cuánto-. Dice el rompiendo el abrazo y limpiando las lágrimas que se salen de mis ojos-Vamos a casa. En el camino solo se escuchaban nuestras risas y más las mías, Thomas me dijo que Louis en una de sus idioteces tratando de coquetear con una de las chicas de la manada que aún no consigue su mate se iba a recostar en una pared y termino en el suelo y la chica se fue riendo del lugar. -Al fin en casa-. Digo saliendo de la camioneta y respirando el olor ya familiar a bosque. Ese olor me recuerda a Dereck Entro a la casa y me recibe un muy contento Louis con un gran abrazo, que por cierto duró así hasta que se durmió, no me soltó en toda la noche le tuve que decir que iba a dormir para lograr que se despegara de mí. Me desperté en mi cómoda cama la cual extrañaba a horrores y me fui a bañar, al salir me coloco una blusa suelta color lila con un pantalón de mezclilla oscuro, unas convers negras y unos aretes en forma de cruz, aliso mi pelo mojado, lo seco, ya lista para bajar a desayunar. Al entrar al comedor encuentro a un Thomas bailando mientras cocina waffles con café y ensalada de frutas, la escena es muy cómica y duro viéndolo unos tres minutos hasta que siente mi mirada o tal vez mis carcajadas después de hacer un paso de Michael Jackson, se voltea y veo que está más rojo que un tomate maduro y eso me causa más risa, tanta que ya ni respiro. -Deja de reírte que tus bailas igual que un mono con diarrea-. Eso hace que estalle a carcajadas por la estúpida comparación, la verdad bailo bien pero frente a ellos bailo pésimo apropósito para no hacerlos sentir mal. - ¿Qué es lo que pasa? los sonidos de alguien burlándose de otra persona me despertaron-. Dice un adormilado Louis buscando la fuente de burla, hasta que ve a Thomas aún rojo, me pide contexto de la situación y al ponerlo al corriente se tira al piso a reír. -Bueno, cómo ustedes se están burlando de mi me comeré todo esto yo solito-. Dice el agarrando los waffles y el café para después sentarse en la mesa. - ¡NO! -. Gritamos Louis y yo al mismo tiempo. -Perdón, perdón, pero no nos dejes sin comer. Luego de jugar casi toda la mañana a call-of duty con Louis terminé dándole una paliza de 56 a 03 a lo cual Thomas se burlaba de él, y Louis, bueno el siempre pedía revancha, Después de terminar pateando el trasero a Thomas en FIFA-56 de 5-1, me di cuenta de que ya eran las dos de la tarde así que decidí pedir pizza y ponernos a ver una película, nos pusimos a ver el conjuro 2 y Louis paso toda la película gritando y escondiéndose detrás de mí, y así pasamos toda la tarde. Ya en la noche les dije a mis hermanos que tenía que hablar con ellos, les conté todo lo que me había pasado, hasta por que el día antes de ir a casa de Connor me dolía el pecho, pero cuando llegué a la parte de que encontré a mi otro mate ellos parecían tristes. -Ashley tenemos que decirte algo y no sabemos cómo lo vayas a tomar-. Dice Louis con tristeza. -Me están asustando, la última vez que me dijeron eso era para decirme que mis padres habían muerto y creo que también para decirme que tenía que irme-. Dije yo frunciendo el ceño. - ¿Te acuerdas que nos dijiste, que Savannah trato de hablar contigo y tu no entendías nada?-.Yo asiento desconfiado.-Pues creo que ya es hora de contarte lo que ella no pudo.
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