No se como, y mucho menos cuando.
Pero a la mañana siguiente me desperté en el hotel con un chándal, obviamente era mío pero todo rastro de la fiesta, la mascara, el teléfono, la pulsera, todo, había desaparecido como si nunca hubiera existido. No voy a negar que eso daba un poco de miedo, no soy una persona con el sueño profundo por lo que me han dado algo para que no sepa cuando la gente estaba en mi habitación limpiando todo, y eso no me gusta, nada pero bueno, Daniel me va oír.
Me levante de la cama y tras coger mis cosas, me fui a mi casa en autobús, me iría en taxi pero ya había gastado todo mi dinero semanal por culpa de Daniel y no me quedaba nada para sobrevivir.
Casi una hora después llegué a mi casa, entre al lugar que estaba en silencio, subí a la primera planta para encontr
