Una rebelde para el CEO

Capítulo 1

Gabrielle

—Elle—Grita mi padre desde su despacho, considerando que puedo escucharlo desde mi habitación que queda justo en el extremo opuesto del despacho de papá, entonces esta muy molesto.

Recorro los pasillos de la casa, mientras camino con las manos en mis jogger, mi top n***o y mis audífonos a todo volumen. En cuanto llego al despacho me quito los audífonos, y toco la puerta.

—Pasa—Escucho tras de ella, al entrar, esta mi padre, imponente como siempre, sus ojos verdes, y su traje gris casi inmaculado, su cabello n***o bien peinado, para tener casi 50 años, tiene demasiado cabello aun. Por desgracia aquí esta mi madrastra… bueno la ultima puta con la que mi padre se casó, Mitzy, guapa, delgada, y con operaciones en labios, pecho, nariz y pómulo, con los brazos cruzados frente a ella, yo pongo los ojos en blanco, lo que provoca que se moleste mas—Siéntate—Me ordena sabiendo que no obedeceré

—¿Te quedarás aquí? —Le pregunto a Mitzy directamente—Porque en ese caso, yo puedo regresar después…

—Tu no me puedes correr, mocosa mal criada—Me dice con claro enojo

—Mitzy, cariño, déjanos a solas, por favor—Dice mi padre, ella le dedica una mirada claramente molesta, pero lo obedece. En cuanto sale de la oficina me siento, mi padre se aprieta el puente de su nariz con cansancio—Algún día tendrás que aceptarla, es mi esposa

—¿La cuarta? ¿O la quinta? —Le digo con burla en la voz, subiendo una de mis piernas a la silla, la rodeo con mi brazo y recargo la barbilla en la rodilla.

—Aun no entiendo porque la odias tanto…—Dice bajando la mirada

—Primero por el engendro del mal degenerado que tiene por hijo…

—Gabrielle, no hubo pruebas…era palabra contra palabra—Me dice y le sonrío de medio lado, y niego con la cabeza en modo de burla.

—Segundo porque solo esta aquí por tu dinero—Le digo contando con los dedos—Ah y porque sé que no te es fiel…

—Gabrielle…

—Ya sé, ya se, “no hay pruebas” —Le digo imitando su tono cuando hago las comillas con la mano. El suspira de nuevo

—Regresemos al porque estas aquí—Dice poniéndose en pie—¿En que estabas pensando?

—¿Respecto a que…?

—Respecto a que hackeaste a la barra de abogados, para cambiar calificaciones de los exámenes

—Yo no hice tal cosa

—Gabrielle…—Dice con cansancio

—No hay pruebas … ¿No? —Suspira, y lo veo molesto, de verdad molesto, y entrecierro los ojos con una sonrisa en los labios.

—Pero si que hay pruebas de que vendiste el examen de tu profesor de derecho conciliatorio—Abro los ojos, eso si me sorprende—Debes ser cuidadosa de con quien haces negocios.

—Mierda—Digo bajo

—Estoy cansado de tus tonterías Gabrielle, todo cuesta, todo…

—Papá, solo fue…

—Te expulsaron—Me grita—Tuve que donar 200,000 dólares, para callar a la universidad, y que te dejen seguir estudiando—No digo nada, porque lo que menos quiero es seguir estudiando derecho—Pero esta vez vas a estudiar contabilidad y negocios internacionales

Mierda, No quiero. Muerdo mi mejilla interna

—De acuerdo—Le digo molesta, ya se me ocurrirá como hacer que me corran.

—No, esta vez no hija, el gobierno presento cargos contra ti, porque aunque lo creas o no, dejaste rastro.

—¿Cargos? —Pregunto sorprendida

—Para evitar que vayas a la cárcel, me cedieron tu tutoría total

—Tengo 18 años padre…

—Si pero tus actos demuestran que no eres racional ni apta para cuidar de ti.

—Eso es pura basura, y lo sabes

—Gabrielle

—No, eres el mejor abogado de la ciudad, deberías hacer algo

—Fue el mejor trato que conseguí, porque has estado infringiendo una y otra vez tus faltas, así que si no quieres ir a la maldita cárcel, y que además te quiten toda tu herencia, es necesario que hagas un cambio

—Lo hare

—El problema es que ya no confío en tu palabra, Elle—Yo solo lo observo—Te iras con Isaac, el te enseñará a trabajar y disciplina—Me da una hoja con una dirección y un teléfono. Mientras me pongo en pie.

—¿Quién carajo es Isaac?

—Su familia se ha ofrecido, para ayudar a que mejores, su madre es psicóloga—Pongo los ojos en blanco—Vivirás con el, y estarás bajo su cuidado.

—¿Por qué?

—Porque yo lo ordeno, y si faltas en algo…

—¿Por qué no puedo ir con mamá? ¿O quedarme aquí?

—Porque tu madre no te presta atención y yo no puedo estar pendiente de ti todo el tiempo—Me levanta demasiado la voz—No puedo seguir lidiando contigo, Gabrielle, el negocio esta pasando por muchos cambios, y justo ahora no puedo

—Y tu solución es mandar a tu mayor problema, del otro lado del estado.

—Quiero que te presentes a las 7 de la tarde en la dirección que te di, es donde vive Danver…

—Espera, te refieres a ¿Isaac Danver? ¿El hermano de Mia Danver? ¿De grupo Danver?

—Si—Bien esto no pinta tan mal, Mia es una vieja amiga del internado, algo normal, familia normal, le gustaba estudiar, hasta que conoció a George, pero en general es una gran chica. Compartimos cuarto un semestre, antes de que me corrieran—Mia, va a vivir también con su hermano en lo que termina la escuela.

—Genial

—No Elle, no mas problemas, una sola cosa que me entere, así sea mínima, y no dudaré en mandarte a la cárcel, y te quitaré todos tus privilegios, y cuando digo todos, es todos, Gabrielle. Incluido el hospital.

Por primera vez mi padre me amenaza con eso, por primera vez me fulmina con la mirada, y yo a el. Y es la primera vez que usa algo que realmente me importa en mi contra. Suspiro.

—Bien—Le digo, camino hacia la puerta de su despacho

—¿Y Gabrielle? —Llama mi atención mi padre—Quiero buenas notas.

—Si padre—Suelto esta ultima palabra con veneno.

Con mis amigos, organizo una escapada al lago, llevo el carro que me regaló mi padre cuando me gradué del instituto. Solo llevo algunas cosas de casa, el camino de casa de papá al lago son 4 horas, pero no planeo regresar a casa de mi padre hoy, tengo que ir a las 7 a casa de Danver

En el lago es una locura, los chicos no dejan de correr y traer alcohol, lo que era una reunión tranquila, termina siendo un maldito caos. Stu, mi amigo, mi ligue del momento, con quien me divierto, esta tratando de meterme mano, mientras reviso las noticias de Isaac Danver, y la familia Danver en general.

—Vamos nena—Me dice mientras sus besos pasan a mi cuello—Deja eso

Me dice tratando de tomar mi celular, pero yo solo lo hago a un lado, para evitar que lo quite

—Stu, vete, hoy no me voy a acostar contigo—Noto como se tensa

—¿Para que salimos si cada que…?

—Stu, no salimos, solo cogemos muy de vez en cuando, estudiamos juntos y eso es todo. No tenemos una relación—Le digo mirándolo con las cejas levantadas y una sonrisa burlona

—Eres una…—Pero se calla antes de continuar, se va, para evitar decir algo con lo que arrepentirse. Al ver mi reloj, decido tomar camino a casa de Danver. Mientras mi cerebro procesa la información que acabo de leer, es una buena familia, el chico Isaac es el CEO de la empresa actualmente, hace 2 años que sustituyó a su padre, es una empresa que se dedica a la compra y venta de compañías en la quiebra o casi quiebra, además de tener otros negocios de producción de alimentos envasados y tecnología, estas empresas no se bien porque las tienen, pero son recientes. Los padres, aunque ya retirados aun tienen poder sobre la junta aun. Son tres hermanos Isaac, Oskar, y Mia. Isaac es el único que tiene un perfil bastante público, es la imagen de la empresa. Y con esa cara, debe serlo. Cuando llego, noto un edificio de departamentos enorme y lujosos, es en la ultima planta, como es lógico, espero 20 minutos, pero el muy grosero no llega, suspiro, saco mi laptop y simplemente entro a su sistema de seguridad, para abrir la puerta. Prendo las luces para inspeccionar el lugar. Todo esta perfectamente alzado, y el lugar es enorme. Tiene 3 recamaras, con vestidor y baño, una sala con un equipo de televisión que cualquier hombre querría, comedor para 12 personas, cocina, equipada, con una barra, que sirve de isla o antecomedor, del otro lado de donde están las habitaciones hay dos puertas enormes, en una hay un estudio biblioteca, que supongo es su despacho, ya que tiene un ordenador Mac ultima generación, mientras que en la otra puerta, hay un billar, y videojuegos. Al parecer esta es su cueva de hombre.

No me puedo resistir a entrar a la habitación principal, que imagino es la suya, es un concepto minimalista y poco personal. Solo tiene una foto en su mesa de noche, de su familia, y en la otra mesa de noche, hay una foto de él, con una chica, rubia, que sospecho es su novia, ya que en las fotos de internet también sale con ella… Esto va a ser muy, pero muy divertido.

Cuando entro a su vestidor, me llevo la mano a la boca, dios, es un maldito obseso del control, tiene sus trajes acomodados por colores y tonos, sus zapatos impecables, abro un cajón, donde se ven 15 relojes, de diferentes tamaños, marcas y estilos. Lo cierro y al abrir otro, de corbatas de nuevo parece una paleta de colores bien ordenados. Sonrío para mi, para empezar a jugar un poco con esta pobre alma.

Bien, sé que mi padre me amenazo, pero si algo he aprendido, es que seguramente el me querrá tener menos a mi aquí que lo que yo quiero estar, así que seguro también lo tendrán amenazado con algo.

Y es hora de empezar a probar los limites.