—No tengo más opciones Logan, al menos no… si quiero… — no termino de decir las palabras porque aún es muy pronto para que sepa todo — Necesito casarme, al igual que tu Logan, digamos que esto solo será un contrato más para firmar, un contrato que dure mínimo un año y medio — le digo sacando de mi plato un par de frutas tranquilamente con el tenedor.
—Claro — dice él con voz sarcástica — ¿Crees que el casarte solo será como un contrato más? — pregunta bufando — Que el compartir momentos, una casa, una cama, conocernos mutuamente luego de un año… ¿Solo terminará todo y ya? — pregunta él un poco molesto y con toda razón, suena demasiado estúpido mi “contrato de matrimonio”, pero es que así lo veo yo, no quiero a alguien a mi lado porque dice que fue “amor a primera vista”, eso no me lo creo, solo necesito a alguien quien sea “confiable” para esto y también que me sirva de protección y ya luego cada uno por su lado ¿no?, Que tan difícil puede ser convivir con alguien por un año y medio y luego de que pase, seguir adelante por separado, no hay amor de por medio y tampoco cariño, todo será más fácil si no hay nada de eso.
—Así es Logan, solo será un año y medio, supongo que también es suficiente para ti, los dos ganamos aquí, que hay de malo — le digo tomando la carpeta y dejándosela a su lado para que no arme algún escándalo.
—¿Qué es esto? — pregunta tomando la carpeta aún molesto.
—Bueno… Esas son las cláusulas que tomarán vigencia a partir de hoy, si estás de acuerdo, claro —
—Valla — sonríe con ironía — Esto no me lo esperaba — reniega leyendo — Definitivamente no me lo esperaba —
—Tómalo como un seguro — irrumpo su lectura, viendo que levanta su mirada fija hacia mí — Este contrato te dará la garantía de que cumpliré mi palabra y yo tendré la garantía de que tu cumplirás la tuya, es simple —
—Yo sé que cumplirás —
—Pero yo no sé si tú lo harás, no me fio de nadie. Asique si estás de acuerdo con las cláusulas, fírmalo y entonces estaré segura de dar mi tiempo a todo lo que se deba hacer de aquí en adelante —
—Está bien, está bien — resopla — Solo me parece algo exagerado todo esto —
créeme que a mí también, respondo en mi mente.
—Aquí tienes un lápiz — le digo sacando el mío de mi bolso. A lo que él lo toma — Te daré una copia luego si la quieres —
—Está bien — asiente —
Espero que termine de leer todo, mientras tomo desayuno relativamente en tranquilidad y mientras él también come de sus medias lunas.
Primero que nada, dormiremos por separado, no puedes meterte con nadie mientras estés casado conmigo, tampoco a escondidas porque sabes que luego de hacer público nuestro compromiso estarán todos los ojos puestos en nosotros, por lo que tiene que ser lo más real posible — le digo haciendo una breve pausa para pensar — Puede ser que estamos inmensamente “enamorados” y por eso decidimos sacar a la luz nuestro noviazgo junto con el compromiso y que ya no queremos ocultarlo más… Increíble no crees y se me acaba de ocurrir — le digo sonriente.
—Muy bien Sol, estoy de acuerdo con lo que dices… Menos el que dormiremos por separado, pero luego veremos ese detalle — dice él dándole otro sorbo a su café — Ahora sí, tienes que tomar en cuenta que al igual que tú, soy muy conocido, estricto y que siempre participó en los eventos a los que soy invitado, lo que significa que tienes que ir a donde yo vaya —
—Vas a tener que ir de vez en cuando solo, sabes que al igual que tú, yo también trabajo Logan, tengo que manejar la empresa de mi padre y para eso necesito estar aquí o donde me llamen y además de eso tratar de llevar todo en orden los viñedos, desconozco bastante lo que debo hacer ahí. Pero puedo aprender con la ayuda de Iker e Izan que son los encargados de la distribución de los vinos — termino de decir para poder terminar mi jugo.
—Lo sé. Te puedo ayudar en lo que pueda, tendremos que estar en constante comunicación Sol y eso implica conocernos, viviremos juntos y tenemos que conocernos para poder saber más del otro — opina observando mi rostro.
—¿Sabes que esto no es será un matrimonio de verdad, no? — le pregunto con inquietud.
—Puede que comience así, por ahora será así — responde volviendo a sonreír por lo que yo frunzo el ceño pero decido dejarlo pasar al pensar lo loco que suena eso.
—¿Y cuándo vamos a hacer público el compromiso? — le pregunto con intriga.
—Esta semana que viene tengo que viajar a Manhattan para inaugurar uno de los hoteles nuevos, podríamos hacer ahí nuestro noviazgo oficial… Ya luego veremos fecha para hacer una fiesta en honor a nuestro compromiso — responde cruzándose de brazos a la espera de mi respuesta.
—¿Qué día? — le preguntó tras unos segundos de pensar.
—Jueves… Pero debemos estar por lo menos dos días antes, tengo que ir a organizar todo — dice él soltando un suspiro.
—Me parece bien — le digo y pienso en preguntarle sobre el “matrimonio” — Nos casaremos solo por el civil ¿No? — le pregunto mirándolo fijamente.
—No — dice a lo que yo abro lo ojos sorprendida y lo miró sin entender — Nos casaremos tanto por el civil como por la Iglesia Sol, sino no será creíble, al menos no delante de los ojos de mi abuelo, a él debo convencer de mi matrimonio y solo estará seguro al verme salir de la mano con mi esposa de la Iglesia — justifica sin una pizca de gracia.
—¿Realmente es necesario? — pregunto un poco asustada.
—Si Sol, es necesario no te preocupes si no quieres organizar nada, no lo harás si no quieres, contrataremos a una organizadora de bodas y todo, para que tú te concentres en tu trabajo — dice él, por lo que pienso y creo que estaría bien.
—Me parece bien — le digo viendo que en sus ojos hay algo de desilusión, por lo que yo decido que es mejor que ya me vaya del lugar — Creo que por el momento eso está bien, hablamos en otro momento, debo ir a la empresa ahora — le digo viendo que ya son las diez y media y a decir verdad estoy huyendo.
—Por supuesto, adelántate yo pagaré — dice parándose y tomando sus cosas para caminar hacia el recibidor por lo que suelto un suspiro y me pongo de pie tomando mis cosas.
Camino hacia la salida y luego de unos minutos le veo caminar hacia mí, por lo que continuó mientras me coloco mi abrigo, al estar ambos con los abrigos puestos por el viento helado que hay. Salimos del local encontrándonos con las dos camionetas casi iguales — Bien nos vemos luego — dice acercándose y dándome un beso en la mejilla — Cuídate — pide con una pequeña sonrisa para luego darse la vuelta y caminar a su camioneta. Cuando le veo marcharse, aún me encuentro en el mismo lugar, con la carpeta en mano y pensando en todo el tema del matrimonio.
Al ver que la gente se me quedaba mirando reaccionó y camino rápidamente a la camioneta, a lo que Paúl la abre y yo entro.
—Vamos a la empresa — le digo a Bruno.
—Claro — dice Bruno para comenzar a manejar.
A los veinte minutos llegamos a la empresa y me baje en la entrada junto con Paúl, solo hay un guardia como es día sábado nadie está en la empresa, entramos saludado a Max y subimos al último piso para seguir caminando directo a la oficina que usaba mi abuelo y que ahora es mía, al entrar todo está ordenado y silencioso, sin pensar mucho en recuerdos camino a mi lugar para buscar los apuntes de la última junta que tuvimos el martes, al encontrarlos los tomo y salimos de la oficina para tomar el elevador de nuevo.
—Es él — dice Paúl pulsando el botón para bajar.
—Así es, Logan será mi ahora futuro marido o esposo… Suena irreal — digo con gracia.
—Espero que sea el correcto — dice Paúl serio y no entiendo a lo que se refiere.
—¿A qué te refieres? — le pregunto a lo que él se gira para mirarme de frente.
—A que si te casas… Es para toda la vida Sol — dice Paúl tatuándome como muy pocas veces lo ha hecho por lo que me llama la atención.
—Esto solo será por un tiempo Paúl — le digo seria, por lo que esta vez es él quien ríe sin gracia.
—¿Por qué, él? — pregunta volviendo a sorprenderme.
—Bueno… No lo sé… Logan también se verá beneficiado y sé que no me delataría, no le conviene — le respondo sin mirarlo ya que por primera vez me siento intimidada por él.
—No me refiero a eso Sol… Me refiero a que lo eliges a él porque tiene dinero también ¿no? — dice a lo que yo lo miro enseguida. Pero no le digo nada porque las puertas del ascensor se abren haciendo que yo rápidamente salga para caminar directo a la salida siendo está abierta por Max.
—Gracias y adiós Max — agradezco y me despido al estar ya fuera.
—Adiós señorita — se despide Max mientras que yo sigo caminando a la camioneta que aún está estacionada en la entrada. Iba a abrir la puerta pero se me adelanta Paúl dándome una mirada diferente, no digo nada solo carraspeo y me entro esperando a que él suba, pasan unos segundos en donde él se queda de pie afuera pero Bruno hace sonar el claxon haciendo que Paúl camine un par de pasos y abra la puerta de adelante para subir. No pasa mucho cuando Bruno echa a andar la camioneta.