bc

ME ENAMORE DE MI SUMISA

book_age18+
707
FOLLOW
3.9K
READ
love-triangle
HE
forced
kicking
office/work place
friends with benefits
like
intro-logo
Blurb

Arrogante, exasperante, sexy e irresistible, Noah Brown es el dueño de una prestigiosa empresa en el día y por la noche le encanta ser el amo y adueñarse de todas las mujeres para someterlas a sus más perversos deseos. Si quieres pasar de ser una bibliotecaria a una verdadera sumisa, necesitaras de su ayuda ¿Quieres vivir un cuento de hadas donde el príncipe es delicado y caballeroso o prefieres a una historia +18 con adonis que quiera dominarte todo el tiempo? ¿Cómo pasas de ser una bibliotecaria con una vida calmada a una sumisa domada por el amo mas sexy?

chap-preview
Free preview
CAPITULO 1 ¿Cómo llegue hasta aquí?
Me encontraba con ambas manos atadas en las barandas de la cama del hombre más deseado por la cuidad, un adonis, tenia todo lo que una mujer deseaba, alto, rubio de ojos azules como el cielo, su cuerpo era para morirse, tonificado, su abdomen bien marcado. Sus enormes manos sostenían un látigo, tenia una mirada tan penetrante, digno de un gran amo. Yo me encontraba nerviosa, lo miraba expectante, él tenía una sonrisa lujuriosa en su rostro. -¡Bien, pequeña! ¿Quieres ser una gran sumisa? – Su voz grave hacia que todo mi cuerpo temblara. -S-si – Respondí con nerviosismo. -Primero debes saber la regla principal – Lentamente comenzó a caminar hacia la cama, yo tenia la vista perfecta, su cuerpo estaba desnudo y podía apreciarlo muy bien, trague un poco de saliva. -¿C-cual es esa regla? – Le pregunté curiosa. -No te puedes enamorar, los sentimientos no son algo que se permiten en esta práctica, debes tener claro que esto solo será s*x*o y placer y sí que vas a recibir mucho de eso… ¡Eso te lo puedo garantizar! – Cuando estaba en la orilla de la cama tomo unos de mis pies y lo ató con una correa. -¿P-por Q-que me tienes que atar? Pensé que… – Sentí un suave golpe en uno de mis muslos. Segunda regla: No puedes hablar si tú amo no te lo pide – Asentí con mi cabeza – Él siguió atando mi otro pie, mientras hablaba – Tienes que cederme todo el poder y dominio a mí, si quieres que te enseñe como ser una buena sumisa ¡Claro esta! No tienes de que preocuparte, mientras estes bajo mi dominio no dejaré que nada malo te pase, me encargaré de cuidarte y de darte todo lo que necesites… – Una sonrisa maliciosa se le dibujó en su rostro - ¿Aceptas? – Me dijo mientras termino de atarme a la cama por completo, estaba completamente inmóvil, no podía creer que con tan solo esto ya algo dentro de mi se estaba comenzando a encenderse, un calor iba subiendo por todo mi cuerpo, sentí como incendio se comenzara a encender entre mis piernas. Con dificultad respondí a su pregunta – Acepto – Tragué saliva, este hombre estaba despertando en mis los más oscuros deseos. -Debes tener claro que si me desobedeces tendrás un castigo y que si te portas bien tendrás un premio. Aunque me gustan más los castigos… – Me tenía ahí, amarrada por todos lados, vi como se giró lentamente para tomar asiento, en un sofá que tenia en la enorme habitación – Si me garantizas que cumplirás al pie de la letra todas mis ordenes, yo te garantizo que seré bueno contigo y que en menos de lo crees serás la sumisa más deseada – Entrelazó sus dedos entre su hermoso cabello rubio. -¡Lo prometo! – El calor se hacia cada vez mas intenso, y estaba a punto de explotar por la excitación, pues antes de irse a tomar asiento, había puesto un vibrador ergonómico en mi clítoris. -Veo que ya está comenzando a funcionar el juguetico que puse allí – Arqueo una de sus cejas. -¡P-por favor! Ya no aguanto más – Sentía como todo mi cuerpo vibraba, como mi intimidad palpitaba por el calor que estaba sintiendo, queria que me hiciera suya. Vi como se levantó del sofá y comenzó a caminar hacia mí. Pensé que por fin me daría todo el placer que mi cuerpo estaba deseando, pero al llegar a donde me encontraba sentí un suave golpe en mi intimidad, eso me hizo brincar. -Te dije que no hablaras si no te lo permitía ¡Veo que vas a ser una sumisa un poco difícil! – Tomó asiento a mi lado y comenzó a rozar aquel látigo de cuerpo por todo mi cuerpo – Eres hermosa, puedes volver loco a cualquier hombre – Vi como negó con su cabeza, como si por unos cortos segundos sus pensamientos se hubieran dispersado – Bien, continuaré con las indicaciones. Nunca cuestiones mi ordenes, siempre debes acatar mis normas, así nos evitaremos problemas ¿De acuerdo? – Yo asentí con la cabeza, realmente no estaba escuchando sus palabras, me había perdido desde el momento en que le subió la velocidad al vibrador por haber hablado sin su permiso, ese era el castigo me había dado. Caminaba lentamente por toda la habitación, me observaba mientras yo me retorcía en la cama por el placer que me estaba dando aquel vibrador. Él disfrutaba verme moverme, para intentar tocarme y así poder saciar todo el deseo que tenía guardado dentro de mi - ¡Hoy no te voy a hacer nada! – Abrí mis ojos al escuchar eso que había dicho. -¿Q-que? ¿P-por qué? – Dije agitada. Con el control que tenia en su mano, le subió la velocidad al vibrador, mi cuerpo sintió una corriente recorrerlo, comencé a jadear desesperada -¡P-para p-por f-favor! – El solo sonreía. -Te dije que no puedes hablar hasta que no te lo autorice. Y no, no te voy a hacer nada hoy porque tenemos que firmar un contrato. -¿U-un contrato? – Arqueo una de sus cejas y le subió otro nivel al vibrador, queria enloquecerme, sentía que mi clítoris iba a explotar, era un incendio entre mis piernas. -¡Te dije que no hables hasta que no te lo ordene! A este punto vamos a llegar al ultimo nivel y créeme si ahora estas así, en el ultimo nivel vas a enloquecer – Hizo una corta pausa - ¡Bien! No acostumbro a estar con ninguna mujer si antes no hay un contrato de por medio, es para cuidado de ambos – Los jadeos se comenzaron a escuchar cada vez mas fuerte, yo ya no podía seguir conteniendo todo lo que tenia dentro. -N-noah Por favor, p-para ya… Y-ya no puedo soportarlo más, siento que voy a enloquecer – Le suplicaba que parara, que ya me quitara el vibrador, al ver que estaba a punto de llegar a mi clímax lo apago, sentí como todo mi cuerpo se tensó, mi respiración estaba totalmente agitada – G-gracias – Le dije mientras intentaba tomar un poco de aire. -¿Gracias? ¿Quién dijo que iba a detenerme? Al parecer, no escuchas muy bien, porque me la he pasado diciéndote que no hables si no te lo permito y me has estado desobedeciendo y no puedes llamarme por mi nombre ¿Entendido? – Abrí los ojos como platos. -¿Entonces? -¿Entonces? – Miro hacia el techo por unos segundos, su enorme m*****o estaba erecto, sabia que tambien estaba deseándome hacerme suya, pero se estaba conteniendo - ¿Entonces? Solo no me place que te vengas ya… no sería divertido – Llevo una de sus manos su enorme intimidad, me miro con descaro - ¿Quieres esto verdad? – Ladeo una sonrisa – Anda puedes contestar – Me señalo lo que tenia entre sus manos. Yo solo asentí. Otra vez encendió el vibrador, pero esta vez la vibración era mas fuerte, mi cuerpo dio un enorme brinco y todo mi ser comenzó a despertarse nuevamente, de mi boca salían fuertes gemidos – Se dice ¨Si amo¨ ¿Entendido? – Comencé a asentir mientras me retorcía en toda la cama por lo que estaba sintiendo. -¡Y-ya entendí! ¡P-por favor amo detente ya! – Camino lentamente hacia donde yo me encontraba. Mi cuerpo estaba a punto de llegar a su máximo clímax, iba a dar un fuerte gemido cuando, sentí que se apagó, comencé a respirar agitadamente. -¡Bien! Miremos como está esto por acá – Sentó a mi lado, llevo una de sus manos hasta mi centro y comenzó a masajearlo, yo mordía mi labio inferior, disfrutaba cada toque de él – Estas super mojada, me gusta… debo admitir que me encantaría hacerte mía, ponerte en todas las posiciones posibles, castigarte hasta el punto en que mañana no puedas caminar, pero debo contenerme, pues eso no pasará hasta que tengamos el contrato firmado – Sus dedos salieron húmedos, los llevó hasta su boca y los lamio, debo estar loca, por pensar que eso fue lo más sexy y excitante que he visto en un hombre ¡Dios mío, este hombre será mi perdición!   Yo solo lo miraba deseosa de que por lo menos me diera placer con sus enormes manos – Por hoy está bien, veo que no será nada fácil, pero me encanta los retos – Me guiño el ojo y comenzó a soltarme. No podía creer lo que había pasado ¿Qué había sido todo esto? ¿Cómo fue que termine en la cama de Noah Brown? ¿En que me estaba metiendo? ¿podría llegar a satisfacer a este hombre? ¿En qué momento se me ocurrió querer ser una sumida? Pero tenía que ser sincera y la verdad es que ahora solo queria tener un dueño y ese dueño queria que fue él... Noah Brown.  

editor-pick
Dreame-Editor's pick

bc

Navidad con mi ex

read
9.0K
bc

La esposa rechazada del ceo

read
169.1K
bc

Prisionera Entre tus brazos

read
86.9K
bc

Mi Sexy Vecino [+18]

read
52.0K
bc

Bajo acuerdo

read
10.1K
bc

Tras Mi Divorcio

read
511.6K
bc

Yo, no soy él

read
88.6K

Scan code to download app

download_iosApp Store
google icon
Google Play
Facebook