Olivia solo quería encontrarle un sentido a su vida, quería descubrir quién era y de donde venía. Pero un día su vida se convirtió en una película de terror en la que ya no deseaba vivir. Y su deseo se hizo realidad. Forzadamente debió dejar todo atrás y convertirse en alguien más. Se encaminó en un viaje a un recóndito lugar en el mundo en el que encontró más de lo que buscaba, una familia de verdad, un secreto bien guardado y una historia sobre un amor imposible que la ayudó a luchar por su propia historia de amor.

Malia sintió algo extraño dentro de ella en cuanto la última vela de su pastel se apagó completamente. Era la extraña sensación de que algo no estaba bien, nada estaba bien porque unos segundos después borraron la sonrisa más hermosa que conocía, la mujer que llevaba un mar dentro de ella. En solo un segundo un hombre sin compasión y con el bolsillo cargado de dinero asesinó a su madre. Al ser menor de edad y huérfana fue transferida con el primer pariente cercano, su abuelo Hurley con quien no mantenía contacto hace años. Forzada a abandonar la poca vida que le quedaba y como la conocía, se muda a un pequeño pueblo en Irlanda donde su abuelo maneja un hotel frente al mar. Una historia de cómo el corazón más roto se convirtió en magia que desconocía dentro de ella, la magia de una maldición por amor y errores del pasado.

Fleur despertó una mañana y descubrió que no era quien realmente creía. Sus padres no eran sus padres y su vida era una mentira, su identidad era robada. Debió embarcarse en una búsqueda entre la historia y la mentira, descubrir secretos que eran necesarios para llegar donde debía. Mientras tanto Nick, el mejor amigo de su hermano comienza a sentir algo por Fleur y ambos saben que tienen prohibido estar juntos.

En los 21 años de recuerdos acumulados de Elena, en todos se encuentra sola y perdida, acostumbrada a la soledad de quienes la abandonan. Hasta que por un ensayo universitario conoce a los Hills, los cuales descubren que les falta una unica cosa de la vida: Elena.