POV Ian
Esta situación me sobrepasa por completo, la rabia y la impotencia colmaban mi existencia, he pasado por tantas cosas con Aitana y de esa forma me paga...
Me sirvo un trago de licor, y me siento en mi escritorio, me fijo en la vista de mi oficina, las cosas van de mal en peor, mi matrimonio se fue a la mierda, en tan poco tiempo y ya estamos en este punto. Pienso mientras el licor quema mi garganta.
—Buenos días, jefe— Saluda como siempre Vanesa, la nueva secretaria que aún ni le enseñaba a mí quería esposa.
—No sé, que le ves de buenos. — Respondo malhumorado.
—Sé que puedo hacer, para animarte. — Dice con picardía.
La miro, de arriba abajo admirando sus piernas desnudas. Nunca la había visto de otra forma más que mi secretaria. Y resulta ser bien puta.
—Yo también sé, como
