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1288 Words
Algo Más Que Afinidad El silencio que siguió fue pesado, cargado de preguntas que ninguno de los dos estaba dispuesto a formular. Laura finalmente rompió la tensión, girándose para enfrentarlo de nuevo. - Si va a ayudarme, necesito algo más que “afinidad especial”, señor Kentwood - Su tono era firme, pero no agresivo - Quiero hechos, pruebas, algo que explique cómo todo esto encaja. Nicholas la miró, atrapado entre su deseo de protegerla de lo que ni siquiera él entendía completamente y la necesidad de descubrir la verdad. - Le daré lo que pueda, señorita Blackwood. - Finalmente asintió, su voz volviendo a un tono más formal - Pero no espere que todo tenga sentido de inmediato. Esta historia es... complicada. Laura dejó escapar un suspiro, relajando los hombros un poco, aunque la tensión seguía presente en sus ojos. - Entonces será mejor que empecemos. - Se giró hacia la mesa, retomando los documentos - Porque cuanto más descubro, menos sentido tiene todo esto. Cedric no es así, estoy segura… Nicholas observó su perfil mientras hablaba, el movimiento de sus manos mientras organizaba las hojas y miraba el retrato. Su mente se tambaleó de nuevo, inundada por un destello de otra época, otra vida. El rostro de Laura se desvanecía en la imagen de Elise, luchando por sostener un puñado de cartas mientras una tormenta azotaba una ventana antigua. - El no es así… - decía con total convicción – Yo creo en él… Nicholas volvió a la realidad, apretando los puños para anclarse. Tenía ganas de vomitar ante la situación. No debía haber tomado la asignación, pero Victor no iba a transar, lo conocía demasiado bien. Horas de terapia y meditación se habían ido a la basura, en cuanto ¿10 minutos? Había demasiadas cosas que no podía explicar, pero una certeza lo invadía: Laura estaba más conectada a esta historia de lo que ella misma imaginaba. Nicholas respiró profundamente, intentando disipar el tumulto que se formaba en su mente. Las imágenes eran cada vez más vívidas, imposibles de ignorar. Laura, de pie frente a él, se había convertido en un detonante, un faro que encendía imágenes o tal vez recuerdos que no deberían pertenecerle. Su frustración era palpable, como una corriente eléctrica que se extendía por su cuerpo, tensando sus músculos y oscureciendo su mirada. Laura lo observaba con el ceño fruncido, claramente desconcertada por su comportamiento. La forma en que sus ojos recorrían su rostro era inquisitiva, buscando respuestas que Nicholas no estaba listo para dar. No era común que la gente lo sacara de equilibrio, pero había algo en ella… algo que lo hacía sentir vulnerable, expuesto. - ¿Por qué escapar? - preguntó Laura, con un tono cargado de lógica y desafío - ¿Con una amante? No tiene sentido. Era un marqués. Nicholas levantó la vista lentamente, sus ojos encontrándose con los de ella. Su mandíbula se tensó, intentando controlar el torrente de emociones. Podía ver la duda en su expresión, pero también un atisbo de genuino interés, casi de preocupación. - Un noble como él tenía responsabilidades. - Las palabras salieron tensas, casi como un reproche dirigido tanto a ella como a sí mismo- No era una amante. El marqués tenía una prometida... un compromiso entre familias. Laura parpadeó, sorprendida por la seguridad en su afirmación. Había algo en la forma en que lo dijo, como si no solo lo supiera, sino que lo hubiera vivido. Frunció aún más el ceño, retrocediendo un paso mientras su mente intentaba asimilar la idea. - Entonces... ¿por qué huiría? - Su voz sonó más suave esta vez, como si comenzara a dudar de sus propias suposiciones - Si tenía un compromiso, si tenía responsabilidades... Nicholas bajó la mirada, incapaz de sostener su intenso escrutinio. Las palabras resonaban en su cabeza, mezclándose con fragmentos de imágenes: el rostro de una mujer con lágrimas en los ojos, una mano temblorosa sosteniendo cartas manchadas de tinta, el eco de pasos apresurados en un pasillo oscuro. - Tal vez no quería huir. - Finalmente, murmuró, su voz baja y cargada de algo que parecía pesar - Era otra cosa. Laura lo observó detenidamente, su confusión creciendo. Había algo extraño en cómo hablaba, como si no estuviera solo especulando, sino recordando. - Pero eso no tiene sentido. - insistió, cruzándose de brazos- . Si estaba en una posición de poder, ¿Quién podría forzarlo a huir? Nicholas sintió un nudo en el estómago. La lógica de Laura era impecable, pero las imágenes en su mente parecían burlarse de cualquier intento de racionalidad. - No todos los compromisos son tan simples como parecen. - Su tono era más severo esta vez, casi como una advertencia. Laura lo miró con una mezcla de incredulidad y sospecha. Había algo en él que no encajaba, algo que le hacía cuestionar cada palabra que decía. - Habla como si lo conociera. - La acusación salió antes de que pudiera detenerse, su tono bordeando la hostilidad. Nicholas levantó la cabeza de golpe, encontrando sus ojos de nuevo. El aire entre ellos se tensó, cargado de palabras no dichas y emociones reprimidas. - Solo estoy diciendo lo que cualquiera con acceso a los archivos podría deducir. - Se obligó a calmarse, aunque su voz aún llevaba un filo de frustración. Pero Laura no estaba convencida. Se giró hacia el retrato, estudiando la mirada del marqués, esa mezcla de orgullo y vulnerabilidad que tanto la intrigaba. La imagen no coincidía con la narrativa que Nicholas intentaba imponer. - No lo entiendo. - Sacudió la cabeza, hablando más para sí misma que para él - Este hombre no se ve como alguien que abandonaría todo. Nicholas sintió un tirón en el pecho, como si las palabras de Laura lo alcanzaran en un lugar más profundo de lo que estaba dispuesto a admitir. Era una extraña mezcla de dolor y consuelo: dolor, porque sabía que ella tenía razón y consuelo, porque alguien más parecía entender la verdad que él mismo no podía articular. - Quizás... - Su voz vaciló por un momento antes de endurecerse de nuevo - Quizás lo hizo por alguien más. Laura giró la cabeza rápidamente para mirarlo, su expresión llena de preguntas. - ¿Por alguien más? - repitió, su curiosidad encendida de nuevo - ¿Qué quiere decir? Nicholas cerró los ojos un instante, tratando de ordenar sus pensamientos. No podía decirle lo que realmente sentía, no sin sonar como un loco. Pero había algo en la intensidad de su mirada, en la fuerza de su insistencia, que lo hacía querer confiar en ella. - Tal vez la verdad no sea lo que espera encontrar. – Nicholas abrió los ojos y la miró directamente, su voz firme, pero cargada de un peso que no podía explicar - Tal vez la verdad sea mucho más complicada. Laura permaneció en silencio, sus ojos oscilando entre Nicholas y el retrato de Cedric Kingsley. Había algo en su tono, algo que no podía ignorar. Como si, de alguna manera, él supiera más de lo que estaba diciendo. Finalmente, dejó escapar un suspiro, relajando ligeramente su postura. - Entonces será mejor que descubramos la verdad. - Su voz era firme, pero aún quedaba un rastro de duda en su expresión - Porque esta historia tiene demasiadas piezas sueltas y no me gusta trabajar con un rompecabezas incompleto. Nicholas asintió lentamente, aunque su interior seguía siendo un campo de batalla. La verdad era que él tampoco entendía completamente lo que estaba sucediendo, pero sabía que Laura era una pieza clave en todo esto. Y, aunque no estaba seguro de si eso lo tranquilizaba o lo aterraba y no estaba seguro de estar dispuesto a seguir adelante.
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