CAPITULO NOVENTA Y DOS

1357 Words

Pero en el fondo, Ramón sabía que necesitaba ayuda pronto. Cuantos más aliados buscaba, más puertas se le cerraban en la cara. Maldecía en silencio, recordando cómo en el pasado la gente se inclinaba ante él, lustrándole los zapatos solo para conseguir algo de su favor. Ahora, esos mismos “amigos” le daban la espalda en su momento de necesidad. Ramón sintió que el mundo se le venía abajo. Cada día que pasaba, la situación se volvía más desesperada. Habló varias veces con Christoph, esperando encontrar algún tipo de apoyo, pero las respuestas de Christoph solo aumentaban su frustración. —Yo también tengo mis problemas, Ramón, y en gran parte son gracias a ti —le dijo Christoph en una de sus conversaciones—. Estoy resolviéndolos, pero no puedo ayudarte ahora. Ramón colgó el teléfono, sint

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD