Annika, acomodada en su nueva casa, se ha dedicado a decorar el cuarto del bebé con colores neutrales. Aunque no sabe si será niña o niño, imagina que si es una niña, tendrá muchas cosas más que comprar, y si es un varón, deberá hacer algunos cambios. Su vientre se siente extraño, quizás porque ella sabe que una personita se está formando dentro de ella. “Annika, ven a comer”, escucha la voz de Elena. Ella sale del dormitorio, no sin antes darle instrucciones a la persona encargada de la decoración. ¡Qué emocionante momento para Annika! La decoración del cuarto del bebé es un proceso lleno de ilusión y anticipación a un amor. Aunque no sepa si será niña o niño, elegir colores neutrales es una excelente opción. Así, sin importar el género, el ambiente será acogedor y relajante. —Te gus

