Una Esposa De Alquiler

Capítulo 4

— ¿Acepto? — se preguntaron los dos mentalmente.

Ella sacudió la cabeza para sacar su confusión de la mente y decir;

— Acepto casarme con usted, con la única condición, de que por favor me ayude a recuperar la casa de mis padres hoy mismo — jugó de nuevo con sus manos nerviosa.

— Acepta por el interés — se molestó por dentro — bueno su empleador le jugó una mala pasada — la defendió.

¿Por qué estaba teniendo ese debate con el mismo en su mente? La miro y afirmó, de una vez llamos al banco para informarle que el Sr. Patterson tenía una transacción que hacer, y que se había olvidado de pasar temprano.

Dado el renombre de la persona, el banco hizo una sala para él, así tener listo a sus trabajadores para cuando el llegara.

— Srita Evans, venga conmigo — se levantó ajustándose su traje.

— Sophie — dijo ella en un hilo de voz — Si nos casaremos, trateme de tú, soy Sophie — él la miro por unos segundos y afirmó. Luego la tomo de su mano y salió de la oficina.

Sophie aún no entendía porque le había dado su nombre de cariño, como tampoco entendía la razón de sacarla de la oficina con su mano en la de él.

— Verónica, avísale a mi chófer que espere en la entrada, es urgente — le dijo a su secretaria cuando paso por un lado

Ella miraba atónita la situación, ¿Que acaso no era esta la muchachita que estaba llorando en su oficina hace unos momentos?

— Ahora Srita Peevels — dijo su jefe como si hubiera mirado su sorpresa.

— Si, si señor — marco de una vez.

El chófer espero abajo como habían indicado, los llevo hasta el banco, en el camino el Sr. Patterson escribía mensajes como loco a un número en especial que ella no lograba leer a quien eran dirigidos, no es como le importará, ¿O si?. Llegaron justo a tiempo, el encargado de la deuda de los Evans iba saliendo, lo detuvieron para indicar que venían a pagar la deuda de la familia. Sorprendido de ver al CEO de las empresas de prestamistas, pensó en cobrar un poco más, después de todo ese no era su problema cuánto debía pagar la chica, por una u otra razón ella perdería su casa.

— Bueno, me dijo el gerente que vienen a pagar la deuda — dijo el señor ajustando sus lentes — Familia Evans, si aquí están son quinientos millones de dolares — levanto la mirada.

Sonrió al ver la cara de horror de la señorita, eso no era lo que me habían dicho, y había dejado en casa la nota de cobro de parte del banco.

— ¿QUE ES IMPOSIBLE? — Dijo aún con su cara de horror. — Usted me dijo...

— Señorita e solo que dicen los papeles — miro triunfante.

— Disculpe, yo mismo ví la carta de cobro de la familia Evans, y decían 350 millones, una cantidad bastante absurda para una vivienda de esa clase tan baja —

— Auch — dejo para si misma Sophie.

— Oh, señor vera, hay veces que falsifican esas cosas — Dijo como si ella fuera capaz de hacerlo — Yo no creería que una chiquilla de su edad...

— Le agradezco no le falte el respeto a mi prometida señor — dijo molesto.

El banquero se sorprendió, no esperaba que fuera su prometida tomando en cuenta que no veía un anillo en sus dedos. Se puso nervioso de inmediato y empezó a sudar frío.

— Mi Asistente personal acaba de enviarme una foto del recibo — le mostró el mensaje.

Era cierto, el recibo estaba dictaminado con una cantidad muy diferente a la que él le había dado, pálido por el error cometido, gestiono su pago de manera inmediata, no sin antes recibir una reprimenda de su jefe y por supuesto el despido inmediato.

Una vez que Sophie salió del banco con su recibo de pago, no podía evitar sonreír, respiraba un poco más tranquila. Pero luego recordó, ¿Cómo su asistente entro a casa?

— Ven, vamos a comer — le dijo abriéndole la puerta del auto.

— Amm... Si claro — dijo un poco confundida de preguntar por sus padres o su asistente en casa.

Manejaron un rato hasta un restaurante en el centro de la ciudad bastante caro. Ella estaba sorprendida, pero supuso que él pagaría todo ¿No? Es así como había leído en algunos libros románticos, aunque esto no eran libros sino la vida real.

Hoy en día pagaban mitad y mitad, pero confiaba en que él recordara que había acabado de pagar su hipoteca y no tenía dinero para pagar comida en este lugar.

Después de pedir pasta a la Carbonara y vino para acompañar, él tomo la iniciativa.

— Creo que es necesario lleves esto — la saco de sus pensamiento.

Le entrego un anillo de compromiso bañado en oro y una piedra en el centro, aunque ella no sabía de que piedra se trataba exactamente. Él tomo su mano derecha y lo coloco, ambos observaron como entro de manera exacta en su dedo, movieron un poco su cabeza de lado sorprendidos por la coincidencia.

— Gracias — Dijo Sophie moviendo su mano de la de él. — Sr. Patterson, ¿Puedo preguntar cómo su asistente tuvo foto de mi recibo? — dijo mirando su anillo.

— Le pedí a Federico que activará las enfermeras de inmediato, tu vecina les abrió, en ese momento una de las enfermeras consiguió el recibo y le pasó la foto a Federico — dijo como si nada.

— Eso es invasión a mi privacidad — dijo un poco molesta.

— Querida, en el momento que aceptaste ser mi esposa, la privacidad en nosotros no existe — a ella le saltaron los ojos, no esperaba que él fuera tan pesado en este momento.

— Pe... Pero, yo no...

— Aquí están los platos — interrumpió el camarero.

— Así que hoy es el día de las interrupciones hacia Sophie — dijo en su mente. — Gracias — hablo en voz alta.

(...)

La cena transcurrio en un silencio, con un poco de tensión en ella, después de comer y pagar volvieron a la casa. Él miraba la hora un poco preocupado, como si necesitará llegar a un sitio de manera rápida.

Al llegar justo al frente de la casa de los Evans, ella sonrió agradecida. Estaba apunto de bajarse cuando el tomo su muñeca, impidiéndole hacerlo.

— Necesito llevarte a algún lugar mañana, podrías estar lista a las 6:30pm — pregunto mientras ella miraba su mano.

— Si claro, solo debo organizar a mis padres y estaré lista — dijo nerviosa.

— Las enfermeras estarán 24 hrs, trata de descansar, para que tus ojeras se vayan un poco por lo menos — le dijo soltando su agarre.

— Está bien — afirmó junto a su cabeza.

Ella había olvidado que tenía enfermeras en casa, esperaba fueran tan agradables como las primeras o mejor aún que fueran las primeras que estuvieron en su casa.

— Sophie, otra cosa más — dijo cuando ella ya se había bajado del auto.

— ¿Si? — pregunto.

— Aleríco — dijo, ella movió su cabeza de lado un poco — Soy Aleríco, si vamos a ser esposos, mejor empieza a tutearme — dijo cerrando la puerta del auto.

Cuando el auto avanzó Sophie aún estaba en shock, había olvidado por completo pedir su nombre entre todo el apuro, y aunque ella había pedido que la tuteara, él no le había dado su nombre, hasta ahora.

— Aleríco — sonrió cuando pronunció su nombre de manera suave. — Es extraño, pero lindo — camino hasta su casa.

Había entrado a su casa y había descubierto que el Asistente de Aleríco estaba aún ahí, encargándose de dar indicaciones a las enfermeras y llenando los estantes de comida, Sophie estaba muy sorprendida, nadie se había preocupado así por su familia y por ella, aunque cabe destacar que todo era un fachada, pensó que a lo mejor una vez anunciarán su compromiso iba a tener gente mirándola, y observándola, de donde vivía la futura esposa del CEO.

— Por contrato — pensó mentalmente.

Se acercó a Federico para pedirle una explicación, pero él sabiendo a qué iba la chica le dió todos los pormenores, incluyendo que mañana entre las 3:30 y las 4pm llegaría una chica para peinarla y maquillarla, debía ponerse algo semi formal pero elegante, pues conocerla al padre de Alerico y su familia.

Se puso nerviosa, no esperaba que nada de esto comenzará así se rápido, agradecio que la colocada al tanto y se dirigió a ver a sus padres, estaban encantados con la atención. Pero ellos decidieron preguntar que sucedía, en vista de que la habían escuchado llorar algunas noches en su habitación, también había estado viendo sus ojeras y su piel ponerse gris. Pero ahora mismo parecía tener un poco más de brillo.

El Sr. Federico les había indicado que venían de parte de su hija, pero ellos sabían que Sophie no tenía trabajo desde hace tiempo, por ello todo se estaba racionando incluso la comida, ¿como es que ahora tenía una gran cantidad de dinero para pagar la comida y enfermeras?